(Consolida con comunicado de G-20)
Por David Lawder y Jason Lange
WASHINGTON, 15 abr (Reuters) - Los líderes del Grupo de las 20 principales economías del mundo dijeron el viernes que estaban animados por la reciente recuperación de los mercados financieros, pero advirtieron que el crecimiento global era "modesto y dispar" y está amenazado por la debilidad de economías basadas en las materias primas.
En un comunicado emitido tras su reunión en Washington, los ministros de Finanzas y los jefes de los bancos centrales de las 20 economías industrializadas y en desarrollo reiteraron su promesa de abstenerse de devaluaciones competitivas de monedas, pero no ofrecieron nuevas iniciativas para evitar que el crecimiento se estanque.
Los funcionarios del G-20 adoptaron una posición levemente más positiva sobre los mercados financieros que, dijeron, mayormente se han recuperado de fuertes liquidaciones previas y se encontraban mejor que cuando se reunieron por última vez en febrero.
"Sin embargo, el crecimiento se mantiene modesto y dispar, y persisten los riesgos a la baja y las incertidumbres sobre el panorama global ante un escenario de una continua volatilidad financiera, los desafíos que enfrentan los exportadores de materias primas y la débil inflación", dijeron.
El comunicado también apuntó a una posible salida de Reino Unido de la Unión Europea, conflictos geopolíticos, terrorismo y flujos de refugiados como complicaciones para el panorama económico mundial.
Además el texto reiteró las promesas del G-20 de "utilizar una política fiscal flexible" para fortalecer el crecimiento, la creación de empleos y la confianza. Mantuvo la referencia a que los países miembros "continuarán explorando opciones de política", agregando que deberían ser "adaptadas a las circunstancias de los países".
Los países que integran el G-20 también sostuvieron sus promesas previas de realizar consultas cercanas sobre las tasas de cambio.
"Reafirmamos nuestros compromisos previos sobre tasas de cambio, incluyendo que nos abstendremos de devaluaciones competitivas y no apuntaremos nuestros tipos de cambio para propósitos competitivos. Resistiremos todas las formas de proteccionismo", afirmaron.
La cita del G-20, el punto culminante de las reuniones de la primavera boreal entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial en Washington, se produjo en medio de una creciente presión sobre las naciones más ricas para que impulsen el gasto en infraestructura, desregulen industrias y fomenten la creación de empleo.
A principios de esta semana, el FMI bajó su previsión de crecimiento para la economía mundial en el 2016, la cuarta reducción en menos de un año.
Las reuniones de esta semana se dieron en momentos en que una serie de economías clave que dependen de las materias primas atraviesan por un período de debilidad, particularmente Brasil, que enfrenta su peor recesión en décadas. (Reporte de David Lawder, Reporte adicional de Jason Lange, Balazs Koranyi, Jan Strupczewski, Lindsay Dunsmuir, Leika Kihara, Gernot Heller y Koh Gui Qing, editado en Español por Manuel Farías)