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Por David Alire Garcia
PUERTO VALLARTA, México, 23 oct (Reuters) - México se preparaba el viernes para enfrentar los embates de Patricia, uno de los huracanes más poderosos jamás registrado, que se acercaba a las costas del Pacífico mexicano forzando el desalojo miles de personas de centros turísticos, el cierre de comercios y el corte de servicios para evitar una catástrofe.
La Organización Mundial de Meteorología (OMM) equiparó a Patricia, de categoría cinco, con el devastador tifón Haiyan del 2013 que azotó Filipinas, destruyó alrededor del 90 por ciento de la ciudad de Tacloban y dejó más de 6,300 muertos.
Autoridades dijeron que Patricia ha provocado el desalojo de 15,000 turistas nacionales y extranjeros y que tocará tierra al final de la tarde en el estado de Jalisco con fuertes rachas de viento, lluvias intensas y oleaje elevado, a lo largo de una costa con exclusivos condominios y hoteles de lujo.
"Expertos internacionales han considerado este huracán como el huracán más poderoso que haya existido en el planeta", dijo Roberto Ramírez de la Parra, director de la estatal Comisión Nacional del Agua (Conagua) de México.
Cuando estaba cerca de tocar tierra, Patricia soplaba vientos sostenidos de 305 kilómetros por hora y se desplazaba hacia el norte-noreste a 22 kilómetros por hora, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH), que lo describió como un ciclón potencialmente catastrófico.
El huracán se situaba unos 95 kilómetros al suroeste de Manzanillo, estado Colima, y a 175 kilómetros al sur de Cabo Corrientes, Jalisco, el estado donde se ubica la popular ciudad turística de Puerto Vallarta, donde sonaron sirenas en las calles para que la gente se resguardara.
El presidente Enrique Peña Nieto dijo en una entrevista radial que es muy difícil predecir los efectos y daños devastadores que pueda dejar el ciclón y pidió a la gente que se guareciera en lugares seguros.
"Lo que estamos enfrentando sin duda es un fenómeno extraordinario, altamente peligroso", afirmó.
Para evitar un desastre mayor, las autoridades también vigilaban el Volcán de Colima por la posibilidad de que las lluvias se combinen con gran cantidad de ceniza y material volcánico y se produzcan flujos de lodo por las pendientes.
EVACUACIONES MASIVAS
La zona hotelera costera de Jalisco había sido evacuada y miles de personas fueron trasladadas a albergues. El Gobierno federal desplegó cientos de policías, militares y marinos para auxiliar a la población frente al desastre.
Por la tarde, fueran cerradas las carreteras para evitar la circulación de vehículos particulares y conminaron a los pobladores a no salir las calles. Muchas tiendas cerraron y habían colocado tablas de madera para proteger las ventanas.
"Anoche fui al supermercado y las filas para pagar eran enormes, así que me fui y regresé hoy temprano y compré algo de pan, salchichas y queso", dijo Agustín Solís, de 65 años, quien estaba con su esposa en un departamento en un piso 15 de un edificio frente al mar en Puerto Vallarta.
Aunque en principio iba a quedarse allí y estaba poniendo protección a las ventanas, luego de escuchar las advertencias de las autoridades sobre el potencial destructivo del ciclón decidió buscar un refugio.
El aeropuerto internacional de Puerto Vallarta suspendió operaciones y el puerto de Manzanillo, el mayor del país situado en el estado de Colima, y el de Puerto Vallarta, fueron cerrados a la navegación.
Los bancos y las estaciones de servicio dejaron de operar al mediodía, las escuelas suspendieron clases y fue cortado preventivamente el suministro eléctrico en la zona de influencia de la tormenta, dijeron autoridades.
"Estoy muy, muy nervioso (...) La cosa se pondrá muy fea, lamentablemente no estoy con mi familia, yo vivo en Guadalajara", dijo Armando Cervantes, un trabajador del hotel Estancia Dolphins en Punta Pérula, donde se estima pasará el ojo del huracán, y quien estaba encerrado en un cuarto del hotel.
Ninguna de las principales instalaciones petroleras de la estatal mexicana Pemex se encuentra en la ruta proyectada de la tormenta, pero de todos modos la empresa aclaró que instalaciones más pequeñas y equipos en los muelles de Manzanillo, Colima y Lázaro Cárdenas quedaron resguardados.
El Gobierno de Estados Unidos emitió un aviso a sus ciudadanos para que se alejen de los sectores costeros y se refugien en los sitios indicados por las autoridades mexicanas.
"El huracán es tan grande y tan intenso que tiene la capacidad de poder atravesar las dos Sierras Madres que tenemos en nuestro país", dijo Ramírez de la Parra de la Conagua. (Reporte adicional de Tomás Sarmiento en Guadalajara, de Lizbeth Díaz, Ana Isabel Martínez, Adriana Barrera, Verónica Gómez en Ciudad de México. Editado por Marion Giraldo y Pablo Garibian)