El Grupo Volkswagen (ETR:VOWG_p) ha revisado a la baja su previsión de beneficios, esperando ahora que la rentabilidad operativa se sitúe entre el 6,5% y el 7%, lo que supone un descenso respecto a la previsión anterior del 7% al 7,5%. Este ajuste se ha anunciado hoy, mientras la empresa lidia con la posibilidad de cerrar sus instalaciones de Audi Bruselas, que se ha enfrentado a una baja demanda de sus vehículos eléctricos de gama alta.
El posible cierre de la planta de Audi Bruselas es uno de los gastos imprevistos que han surgido en el segundo trimestre, y que el Grupo Volkswagen prevé que afecten significativamente tanto al resultado operativo global del grupo como al rendimiento de su división de turismos.
La marca Audi, que forma parte del Grupo Volkswagen, está evaluando actualmente la viabilidad de su operación en Bruselas mientras atraviesa los retos del mercado de vehículos eléctricos. Esta consideración se produce a la luz de los cambios en las preferencias de los consumidores y la dinámica del mercado que han afectado a la demanda de ofertas eléctricas de Audi.
La previsión revisada del Grupo Volkswagen refleja las implicaciones financieras inmediatas de estos acontecimientos. La empresa está siguiendo de cerca la situación y evaluando los posibles impactos operativos y financieros del posible cierre de la planta de Audi en Bruselas. La decisión sobre el futuro de la planta aún no se ha tomado y se esperan más detalles a medida que evolucione la situación.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.