Investing.com.- Tal y como vaticinaban los expertos, el regreso de la bolsa de Atenas no ha estado exento de números rojos, los que han teñido el parqué al inicio de sesión. Y es que el principal selectivo ha dado sus primeros pasos con caídas superiores al 20%, con penalizaciones sobre todo para los bancos, a quienes no ha sentado muy bien el “corralito” del que siguen siendo objeto.
La bolsa regresaba después de cinco semanas cerrada luego de los problemas previos al referéndum y la incapacidad del Gobierno heleno y sus acreedores de alcanzar un acuerdo, lo que dejó a Atenas en situación de bancarrota.
Nos explicaban los analistas de IG que para evitar males mayores se han tenido que prohibir los cortos y solo se permite invertir con capital no nacional o nacional líquido, pero en ningún caso se permite deshacer depósitos, lo que demuestra que si impera algún sentimiento, desde luego no es el de la tranquilidad y la confianza. “La caída, superior al 20%, demuestra que los inversores, en cuanto se lo han permitido, han cogido su dinero y han volado.
Por otra parte el rescate sigue en el aire y no se puede dar nada por hecho a estas alturas. Grecia tiene importantes vencimientos en agosto a los que tiene que hacer frente. Además, el severísimo castigo al sector bancario en bolsa hace que las necesidades de capital sean aún mayores que antes, lo que amplía la necesidad de un crédito que no parece cerca de llegar”.