Eve, la filial de aeronaves eléctricas de la empresa aeroespacial brasileña Embraer (BVMF:EMBR3), ha presentado su prototipo a escala real de un nuevo "taxi volador" en un acto celebrado en las instalaciones de Embraer en Gaviao Peixoto (Brasil).
El avión eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) es un paso importante para la empresa, que aspira a obtener la certificación y comenzar a prestar servicio en 2026.
El prototipo se presentó el 3 de julio a inversores y clientes, marcando un logro clave en el desarrollo de aeronaves propulsadas por baterías diseñadas para viajes urbanos cortos, ofreciendo una alternativa al tráfico tradicional por carretera.
El Consejero Delegado de Eve, Johann Bordais, indicó que la empresa tiene previsto comenzar las pruebas de vuelo del prototipo a finales de 2024 o principios de 2025, tras las pruebas en tierra que comenzaron en julio.
Este primer prototipo no conforme, que carece de cabina y piloto, se controla a distancia y servirá para probar la aerodinámica de la aeronave y la transición del vuelo vertical al horizontal.
Bordais destacó la importancia de esta fase de pruebas, ya que la empresa está ampliando los límites de la tecnología y la aeronáutica.
Eve ha solicitado la certificación al regulador de aviación civil de Brasil en 2022 y se prepara para tener listos cinco prototipos conformes en 2023, con una preserie de eVTOL prevista para 2026. Bordais describió la fase actual como fundamental para aprender y avanzar hacia sus objetivos.
Para apoyar su desarrollo, Eve ha recaudado importantes fondos desde su debut en la Bolsa de Nueva York en 2022, incluidos casi 400 millones de dólares para el proyecto eVTOL y un posterior préstamo de 92 millones de dólares del banco de desarrollo estatal brasileño BNDES.
Entre los inversores en el proyecto figuran importantes entidades como United Airlines, BAE Systems (LON:BAES), Thales (EPA:TCFP), Rolls-Royce (LON:RR), Acciona (BME:ANA) y Bradesco (BVMF:BBDC3) BBI.
En una reciente ronda de captación de fondos celebrada este mes, Eve consiguió 94 millones de dólares adicionales, con aportaciones de Embraer y la empresa japonesa Nidec. Esta nueva inversión amplía la capacidad financiera de la empresa, garantizando capital suficiente para continuar el desarrollo de productos hasta 2027, más allá de la proyección inicial de 2025.
La cartera de pedidos de Eve es sólida, con cerca de 3.000 pedidos potenciales de partes interesadas, entre ellas United Airlines, Global Crossing y el arrendador de aviones Azorra.
Bordais expresó su confianza en la posición financiera de la empresa, afirmando que la necesidad inmediata de convertir estas cartas de intenciones en pedidos en firme se ve mitigada por la reciente entrada de fondos.
El desarrollo de eVTOL como el taxi volador de Eve forma parte de un movimiento más amplio para introducir soluciones de transporte innovadoras en los entornos urbanos, aunque persisten retos como la preparación de las redes eléctricas para los coches voladores.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.