México, 22 feb (EFE).- El gobernador del estado mexicano de Tabasco, Arturo Núñez, denunció hoy que en una revisión de las cuentas públicas de su antecesor, Andrés Granier, encontró un presunto desfalco de 1.918 millones de pesos (151 millones de dólares) y un elevado endeudamiento.
Nuñez, del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijo a la emisora MVS que funcionarios de su Administración han comenzado a presentar a denuncias en relación con estos hechos.
Los presuntos desfalcos aparecen en las cuentas del estado desde 2007, cuando Granier, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), comenzó a gobernar Tabasco, en el sureste de México.
"Lo más grave es el faltante de 1.900 millones de pesos (151 millones de dólares) de programas federales que la Tesorería de la Federación transfirió, puso a disposición de las cuentas del estado en la Secretaría de Finanzas (de Tabasco), y esta nunca las hizo llegar a las cuentas de las dependencias ejecutoras", explicó.
Además, existen 2.320 millones de pesos (unos 182 millones de dólares) que se adeudan a proveedores dentro de un monto total de deuda muy superior a los 10.000 millones de pesos (787 millones de dólares) que se dijo que había al final del anterior Gobierno, que concluyó el 31 de diciembre pasado.
"Llegamos a la cantidad (de deuda pública estatal) de 17.737 millones de pesos (1.396 millones de dólares) sin que pueda decir que es la cantidad definitiva (...) Es a esta fecha", agregó en la entrevista radiofónica.
Dijo que la identidad de los funcionarios implicados en estos desvíos de fondos "pronto se conocerá" y prefirió no revelarla por el momento.
"Se me ha recomendado por los abogados no dar nombres porque, dentro de la estrategia de la defensa, se podría decir que este es un linchamiento político y que, en tanto no se pruebe en tribunales, nuestra Constitución garantiza la presunción de inocencia", puntualizó.
Indicó que ya comenzó la presentación de acciones legales en el estado contra los presuntos implicados en los desfalcos, y agregó que también lo harán ante las autoridades federales.
Según Núñez, las irregularidades son de tal tamaño que es muy improbable que pasaran inadvertidas para su antecesor: "La autoridad superior era el gobernador, no creo que no estuviese enterado", apuntó.
Esta semana la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que la deuda de los 32 estados del país ascendió a 434.761 millones de pesos (34.233 millones de dólares) en 2012, un alza anual del 11,3 % respecto a 2011.
El dato revela que los pasivos de los estados del país pasaron a representar el 2,9 % del producto interior bruto (PIB), por encima del 2,8 % del año anterior. EFE