Por Laura Sánchez
Investing.com - Los inversores deben evitar apostar por Europa en la búsqueda de acciones de valor, ya que la crisis energética del Viejo Continente significa que el riesgo-recompensa todavía no ha llegado, explica Willem Sels, CIO global de HSBC Private Banking and Wealth Management.
El panorama macroeconómico en Europa es sombrío, ya que las interrupciones en el suministro y el impacto de la guerra de Rusia en Ucrania en los precios de la energía y los alimentos siguen presionando el crecimiento y obligan a los bancos centrales a endurecer la política monetaria de manera agresiva para controlar la inflación.
Por el contrario, EE.UU. ofrece acciones de crecimiento de renombre: empresas que se espera que aumenten sus ganancias a un ritmo más rápido que el promedio de la industria.
Si bien Europa es un mercado más barato que EE.UU., Sels sugiere que el diferencial entre los dos en términos de relación precio-beneficio (valoraciones de las empresas basadas en el precio actual de sus acciones en relación con su beneficio por acción) “no compensa el riesgo adicional que está tomando el inversor”, señala este experto en declaraciones a CNBC.
La temporada de resultados empresariales comenzará el próximo mes de octubre, y el consenso de analistas espera que las rebajas de beneficios sean la nota predominante en todo el mundo a corto plazo.
Los bancos centrales siguen comprometidos a aumentar los tipos de interés para hacer frente a la inflación, a pesar que reconocen que esta estrategia puede provocar conflictos económicos y, posiblemente, una recesión.