La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) ha anunciado que celebrará una audiencia pública de 20 horas a lo largo de dos días, centrada en el incidente ocurrido en enero en un avión Boeing (NYSE:BA) 737 MAX 9 de Alaska Airlines. Las audiencias, previstas para los días 6 y 7 de agosto, profundizarán en la emergencia que se produjo durante el vuelo cuando se desprendió un panel de la puerta a 16.000 pies de altura, lo que provocó un aterrizaje de emergencia.
La investigación de la NTSB examinará los procesos de fabricación e inspección del Boeing 737 MAX, prestando especial atención a la supervisión realizada por los reguladores de seguridad estadounidenses, entre ellos la Administración Federal de Aviación (FAA) y Spirit AeroSystems. La revisión también abarcará los sistemas de gestión de la seguridad y de gestión de la calidad.
El incidente en cuestión tuvo lugar durante un vuelo el 5 de enero, cuando el tapón de una puerta saltó, dejando un agujero visible en el fuselaje y exponiendo a los pasajeros al ambiente exterior. Esto llevó a la FAA a inmovilizar todos los aviones MAX 9 durante varias semanas, exigiendo comprobaciones de seguridad exhaustivas antes de su vuelta al servicio. También se prohibió a Boeing aumentar la producción de MAX hasta que la FAA completara su evaluación de los procedimientos de la compañía.
Las investigaciones revelaron que faltaban cuatro pernos cruciales en el tapón de la puerta del avión implicado en el aterrizaje de emergencia. Esto ha dado lugar al inicio de una investigación penal por parte del Departamento de Justicia.
La presidenta de la NTSB, Jennifer Homendy, indicó en abril que probablemente testificarían representantes de Alaska Airlines, Boeing y Spirit AeroSystems. La FAA y Boeing han dirigido a la NTSB sus consultas sobre la audiencia.
La NTSB también ha tomado medidas para restringir la participación de Boeing en la investigación en curso debido al incumplimiento de las normas por parte de la empresa, que incluyó la divulgación de información no pública a los medios de comunicación y la especulación sobre las posibles causas del incidente. Por consiguiente, Boeing no tendrá acceso a la información producida durante la investigación y no se le permitirá interrogar a otros participantes durante las audiencias de agosto.
Se espera que Elizabeth Lund, vicepresidenta senior de calidad de Boeing, testifique en la audiencia, a pesar de haber hecho anteriormente comentarios que contravenían la normativa de la NTSB. Además, la NTSB ha indicado que emitirá citaciones para garantizar la comparecencia de los testigos de Boeing en la audiencia.
La NTSB ha previsto que la investigación completa del incidente tardará entre un año y 18 meses desde la fecha del accidente en concluir.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.