Por Geoffrey Smith
Investing.com – El director ejecutivo de Vodafone (LON:VOD), Nick Read, va a maldecir su suerte.
El segundo operador de red móvil más grande del mundo probablemente habría preferido un día de noticias más tranquilo para anunciar la salida a bolsa de su unidad de torres, Vantage Towers, para que los medios de comunicación e inversores pudieran haber prestado la debida atención a la última gran idea de Read para desbloquear valor para los accionistas.
En cambio, las pantallas están inundadas de rojo a causa de las preocupaciones en torno a la recuperación de Estados Unidos, el riesgo de un retraso en el último paquete de estímulos de Estados Unidos y la última pelea diplomática entre Estados Unidos y China.
El índice de referencia Stoxx 600 descendía un 1.7% a media mañana de la jornada de negociación en Londres, lo que lo pone camino de interrumpir una racha de tres ganancias semanales consecutivas.
Para colmo, Vodafone incluso superó el rendimiento tanto del mercado en general como del sector de las telecomunicaciones, cayendo sus acciones un 4.8% hasta mínimos de dos meses, tras la decepción de las cifras del primer trimestre de su ejercicio fiscal. La reiteración de la empresa de sus previsiones sobre un flujo de caja libre de 5,000 millones de euros para este año, en un momento en que pocos son capaces de ofrecer una orientación prospectiva, no se ha visto recompensada. El mercado se ha mostrado más preocupado por el hecho de que el descenso del 2.8% de los ingresos pueda convertirse en la nueva normalidad en el actual entorno macroeconómico débil.
Este negocio de las torres lleva años siendo un objetivo de Vodafone. La alta proporción de costes fijos en infraestructura pone una prima a su plena utilización. Abrir las torres al uso de terceros hace que sea más fácil.
El atractivo de una salida a bolsa por separado no ha hecho más que aumentar pues Read y su equipo han visto cómo el mercado conectaba múltiplos cada vez más altos al negocio de las torres: la española Cellnex (MC:CLNX) SA ha sido la que mejor actuación ha ofrecido este año, con una subida del 49%, mientras que la italiana Inwit (en la que Vantage Towers tendrá una participación del 32%) también ha superado la actuación del sector, incluso con una subida más discreta del 5.5%. Las acciones de Vodafone, en cambio, han descendido un 17% en lo que va de año.
Además de la apuesta de Inwit, Vantage Towers tendrá 68,000 emplazamientos en nueve mercados europeos. Mantiene una posición de mercado número 1 o 2 en casi todos ellos.
Vodafone también podría decidir incluir su participación del 50% en la empresa que gestiona sus torres en el Reino Unido, CTIL. Hasta que lo haga, sin embargo, Vantage Towers parece una bestia europea muy continental, lo que, junto con el propio creciente enfoque de Vodafone hacia el mercado alemán, va a explicar de alguna manera la elección de Frankfurt y no de Londres para la salida a bolsa, que está provisionalmente fijada en el primer trimestre de 2021.