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BRASILIA/SAO PAULO, 25 ago (Reuters) - Los préstamos impagos por al menos 90 días en Brasil empezaron a mostrar señales de estabilidad, pese a un leve aumento en julio, una señal de que los esfuerzos de los bancos para ayudar a clientes corporativos a refinanciar vencimientos de deuda inminentes lentamente están empezando a rendir frutos.
La llamada tasa de morosidad, un referencial para los incumplimientos, bajó al equivalente de 5,7 por ciento de los préstamos en circulación el mes pasado, que se compara con un 5,6 por ciento en junio, dijo el Banco Central en un reporte el jueves. el último año, la tasa de incumplimiento ha subido un punto porcentual completo.
No obstante, las tasas de incumplimiento tempranas, o créditos impagos entre 15 y 90 días, cayeron tanto para consumidor como para empresas, una señal de que una estrategia para refinanciar préstamos potencialmente problemáticos antes de lo usual está permitiendo que más prestatarios estén al día con su deuda.
El aumento de la tasa de incumplimiento a 90 días podría haber sido el producto de un crecimiento más lento del crédito en julio, cuando los bancos redujeron sus desembolsos crediticios en un 0,4 por ciento, dijeron analistas.
En las últimas semanas, ejecutivos de bancos brasileños controlados por el Estado estaban más confiados que sus competidores del sector privado de que la economía más grande de América Latina saldrá pronto de una grave recesión.
(1 dólar = 3,2342 reales) (Reporte de Marcela Ayres y Guillermo Parra-Bernal, Editado en español por Janisse Huambachano)