Esta semana el Ministerio de Hacienda (MH) reportó los ingresos y gastos para el mes de enero de 2017. Los ingresos totales crecieron 13,8% interanualmente, explicado sustancialmente por el impacto de los ingresos tributarios, los cuales aportaron 8% de la variación total. Este resultado ha dejado la variación anualizada en 9,9%, siendo 0,4% mayor al mes anterior, pero 0,2% menor al mismo dato del año anterior (enero 2016).
Por su parte, los gastos reportaron un incremento interanual de 6,9%, dato que es 0,6% mayor al mes anterior, pero 2,0% al mismo mes del 2016. El resultado en enero estuvo explicado por el aporte en remuneraciones (con una incidencia de 1,4%) y del componente de transferencias (con una incidencia 1,8%). Para Aldesa, este último es vital en el seguimiento de la proyección del gasto total, debido que al ser 2017 el último año de la administración Solís, por un tema de ciclo político, ese tiende a incrementarse.
El resultado de enero arrojó un déficit fiscal mensual de 0,5% del PIB (¢185,1 millones), el cual ha sido el desbalance fiscal de enero más bajo de los últimos 4 años, donde estacionalmente en dicho mes, en conjunto con diciembre, el déficit se amplía más, producto de gastos importantes como los aguinaldos y el bono escolar.
En Aldesa prevemos que el déficit se irá ampliando gradualmente durante el 2017 en mayor cuantía, respecto a los años anteriores. Desde nuestra perspectiva, la variable transferencias corrientes va jugar un papel fundamental, por ser el último año de la administración Solís. Asimismo, a medida que la inflación vaya retornando al rango meta del Banco Central, tendrá un impacto directo sobre el componente remuneraciones, debido a los aumentos salariales.