Wall Street cayó con fuerza en la sesión del viernes, presionado por el alza de los retornos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, después de que un reporte mostró una desaceleración del crecimiento del empleo en septiembre, pero el aumento de los salarios no fue suficiente para avivar las preocupaciones sobre la inflación o incrementos de tasas de interés más rápidos.
Las nóminas no agrícolas aumentaron menos que lo esperado en septiembre, probablemente debido al efecto del huracán Florence, aunque datos para julio y agosto fueron revisados al alza, mostró un informe del Departamento del Trabajo.
El reporte impulsó a los rendimientos de largo plazo de los bonos del Tesoro, lo que a su vez presionó aún más a las acciones, que se negociaban cerca de máximos récord.
El índice S&P 500 perdió cerca de un 1% en la semana tras alcanzar máximos en torno a los 3.000 pts. En lo que va del año, el índice mantiene ganancias de un 7%, pero ya comienza a mostrar señales claras de divergencia bajista, lo que podría llevar en el corto plazo a una reversión hacia la media de 40 meses en torno a la zona de soporte de los 2.400 puntos (nivel de Fibonacci del 23,6%), lo que podría gatillar un ajuste cercano a un 17% en los próximos meses.
En este momento, el indicador MACD comienza a entregar señales bajistas, mientras que una caída del RSI (base mensual) por debajo de la zona de 70, confirmaría señales de venta en el índice accionario, con un primer soporte en la zona de los 2.770 puntos y posterior en la zona de los 2.500 pts.
Por su parte, el Industrial Dow Jones finalizó la semana prácticamente sin variaciones, pero mostrando fuertes señales de divergencia bajista, por lo que una caída bajo el piso de los 26.400 puntos podría gatillar una mayor presión vendedora y llevar al índice Dow Jones en busca del próximo soporte en la zona de los 23.500 puntos en primera instancia y posteriormente hacia el soporte de los 22.000 puntos (nivel de Retroceso de Fibonacci del 23,6%).
El indicador técnico MACD muestra claras señales bajistas, mientras que una caída del RSI por debajo de la zona de 70 confirmaría venta clara en el índice Dow Jones.
Finalmente, el índice tecnológico Nasdaq retrocedió mas de un 3% en la semana, acumulando una caída del 1,4% en los últimos 30 días.
Tras alcanzar máximos en torno a los 8.120 pts. a fines de agosto, el Nasdaq ha estado operando bajo una fuerte presión vendedora, lo que podría gatillar una corrección mayor hacia la zona de soporte de los 6.500 puntos en el corto plazo por toma de utilidades, considerando que el índice acumula ganancias de un 18% en los últimos 12 meses.
El indicador MACD muestra signos de debilidad, pero sin confirmar aún señales claras de venta, mientras que el RSI comienza a dibujar una divergencia bajista clara, por lo que una caída bajo la zona de 70 confirmaría nuevas órdenes de venta.
A la baja, el principal soporte de corto plazo corresponde a los 7.600 puntos, por lo que una caída por debajo de dicho nivel debería gatillar órdenes de stop loss y presionar al índice hacia la zona de los 7.200 puntos en primera inctancia y posteriormente hacia los 6.500 pts.