El oro observó una ganancia de 0.41%, cotizando en 1,193.22 dólares por onza, tras un incremento generalizado en el mercado de commodities. Cabe señalar que los mayores precios de la energía en Estados Unidos y el repunte en los precios del petróleo han beneficiado las expectativas de inflación para el país por parte de los inversionistas, quienes anticipan que dicho indicador podría repuntar en el mediano plazo. Dado lo anterior, el oro experimentó una mayor demanda a manera de depósito de valor, aunque para la semana seguirán las presiones en contra del metal precioso, pues se anticipan mejores indicadores en el mercado laboral estadounidense, algo que traerá especulación en torno a la política monetaria de la Fed.
Finalmente, el cobre mostró una ganancia de 1.10%, alcanzando un precio de cierre de 6,481.75 dólares por tonelada, ante preocupaciones respecto a la oferta del metal luego de que Glencore PLC, la tercera mayor empresa explotadora de cobre del mundo, anunció que la producción disminuyó 9% en el pasado trimestre. Al mismo tiempo, la expectativa de los inversionistas respecto a mayores estímulos en China beneficia al cobre dado el importante lugar que el país guarda en la compra del metal a nivel mundial.