El peso mexicano inicia la semana en niveles muy similares al cierre del viernes, en niveles alrededor de $20.0 spot, en una sesión sin grandes referencias económicas y financieras que sean capaces de influir en el mercado cambiario de forma clara. La FED seguirá siendo gran protagonista esta semana, con varias comparecencias de distintos miembros comenzando desde hoy (4 funcionarios), siendo su respuesta a los repuntes inflacionistas lo que más preocupa a los inversores.
Además, la moneda todavía se ve afectada por las declaraciones de finales de la semana pasada del presidente López Obrador, quién aseguró que Alejandro Díaz de León, gobernador del Banco de México (Banxico), no será renombrado, por lo que su mandato concluirá en diciembre del presente año.
Por otro lado, aunque parece confirmarse que la inflación en México alcanzó su mayor nivel en abril, la cifra dada a conocer el día de hoy de la primera quincena de mayo muestra que el retroceso en la tasa anual fue menor a lo esperado (5.80% vs. 5.66% pronosticado), una señal de las dificultades que enfrentará en los siguientes meses para converger hacia la meta de Banxico (por debajo del 4.0%). El precio internacional del petróleo repunta cerca de 1.50% en medio de dudas sobre un posible acuerdo nuclear entre países de Occidente e Irán.
Así, por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre $19.88 y $20.04 spot (el euro entre $1.218 y $1.224).
Por su parte, las principales bolsas en el mundo operan con comportamiento lateral, en terreno mixto.
En la agenda económica de EUA de la semana, las referencias más destacadas se publicarán el jueves, con la segunda revisión del PIB del primer trimestre y los datos semanales de paro. Además, el viernes conoceremos la confianza del consumidor de mayo, elaborada por la Universidad de Michigan.
Hoy hablarán tres presidentes regionales de la FED (Loretta Mester a las 10am, Raphael Bostic a las 11am y Esther George a las 4.30pm) y la gobernadora, Lael Brainard (8am). Después de haber registrado dos semanas atrás a un repunte de la inflación americana más agresivo de lo esperado (+4.2%), la semana pasada las Actas de la FED permitieron comprobar que algunos consejeros consideran que, si la economía mejora como hasta ahora, sería apropiado abrir el debate sobre una reducción progresiva de estímulos. En este sentido, cada una de las declaraciones de estos funcionarios será seguida con gran atención.
Mientras, en el mercado de materias primas, el precio internacional del petróleo (WTI) sube hacia 64.50 dólares por barril, en medio de noticias de que se está formando una tormenta en el Golfo de México que podría afectar el suministro y de que funcionarios de Irán declararan que el acuerdo de supervisión nuclear de tres meses había expirado, lo que suscita dudas sobre el futuro de las conversaciones indirectas que podrían poner fin a las sanciones de EUA sobre las exportaciones de crudo iraní.
En México, los precios al consumidor retrocedieron solo -0.01% durante la primera quincena de mayo. Se trata así, de la segunda variación más alta para un periodo similar desde el 2002. Hay que recordar que generalmente en esos días se registra caída en los precios debido a la entrada en vigor de un subsidio a la electricidad por la temporada de calor.
Así, la tasa anual de inflación se ubica en 5.80%, retrocediendo del 6.12% de la quincena previa, un repliegue menor a lo esperado (5.66%), lo que demuestra la dificultad que enfrentará la inflación para converger hacia la meta de Banxico (por debajo del 4.0%). Incluso, el rubro subyacente (excluye bienes volátiles como energéticos y alimentos) subió de 4.13% a 4.22%.
Por último, después de la declaración de finales de la semana pasada del presidente López Obrador, la disyuntiva que tendrá el jefe del Ejecutivo será continuar con los nombramientos incuestionables que ya ha hecho y proponer a una persona con solidez técnica, experiencia probada e independencia de criterio, o buscar a alguien que sea proclive, que se adelante a los deseos del presidente para intentar que el Banxico sirva al proyecto de la 4T más que al país.
El tema es importante ya que gran parte de la estabilidad financiera que existe en México está cimentada en la certidumbre que ofrece un banco central autónomo.