El Banco Central de Chile subió el jueves su cálculo de expansión de la economía a un rango del 3,25 a 4,0 por ciento este año, empujado por un repunte de la inversión y del consumo que también se reflejaría en una esperada mayor inflación.El mejorado cálculo para el Producto Interno Bruto (PIB) es superior a una estimación previa de 3,0-4,0 por ciento, luego de que la economía creció un 1,5 por ciento en 2017, dijo la entidad en su informe trimestral.
El repunte de la economía del mayor productor mundial de cobre se basa en una demanda interna que crecería un 4,1 por ciento este año, de la mano de una inversión que aumentaría un 4,5 por ciento. El consumo avanzaría un 3,6 por ciento.
“Los datos de los últimos meses han sido superiores a lo esperado y no es descartable un escenario en que persista este mayor dinamismo. En particular, si la inversión muestra cifras mejores que las proyectadas”, dijo el informe del Banco Central.
Agregó que continúan estimando una recuperación de la economía que se apoya en un escenario favorable externo, una política monetaria expansiva y el fin del ajuste de la inversión minera y habitacional.
El mejor panorama para la demanda interna, junto con los efectos de la depreciación del peso, reduciría los riesgos para la convergencia de la inflación al 3,0 por ciento. La entidad prevé una inflación de 2,8 por ciento este año desde un cálculo anterior de 2,3 por ciento. En 2019 sería del 3,0 por ciento.
Este escenario dejaría algo más de espacio al Banco Central para continuar con el actual impulso monetario. Estimó que la Tasa de Política Monetaria (TPM) se mantendría en torno a su actual nivel de 2,5 por ciento en el corto plazo, similar a lo que se espera en la última encuesta de operadores.
“El estímulo monetario se mantendrá en torno a sus niveles actuales y comenzará a reducirse en la medida que las condiciones macroeconómicas sigan impulsando la convergencia de la inflación hacia el 3,0 por ciento”, dijo el informe del organismo rector.
Como supuesto, la entidad espera un impulso fiscal coherente con el presupuesto vigente de la nación, incluyendo los ajustes anunciados por el Gobierno y de ahí en adelante supone que el gasto seguirá la senda de gradual consolidación fiscal anunciada recientemente por el Ejecutivo.
En su informe el Banco Central destacó que el principal riesgo en este frente sigue siendo un deterioro abrupto de las condiciones financieras externas, debido a “que los mercados parecen estar más reactivos a las noticias negativas”.
Por ello, reafirmó la necesidad de mantener fundamentos económicos sólidos a nivel local ante eventos en el último tiempo que han tenido mayores impactos en países con alto endeudamiento, déficit fiscal o de cuenta corriente.
En medio de este escenario, el instituto emisor estimó que el precio del cobre, el principal envío del país, anotaría un valor promedio de 3,10 dólares la libra este año y alcanzaría un nivel de 2,95 dólares por libra en 2019.
Las exportaciones sumarían un total de 78.800 millones de dólares este año, mientras que la balanza comercial anotaría un saldo positivo de 8.500 millones de dólares. La cuenta corriente, en tanto, mostraría un déficit de 2,1 por ciento este año.