Cada persona es única y cada trader también lo es. Cada uno de nosotros tiene una diferente aversión al riesgo, una mentalidad en relación a la economía, una cuenta de trading de un tamaño diferente, unos esquemas mentales determinados, y demás aspectos que nos hacen característicos y únicos.
Una estrategia de trading debe ser algo que forma parte de nosotros, no algo "impuesto" por el formador que nos ha enseñado a hacer trading o el curso tan bien valorado qué acabamos de realizar.
Como base, por supuesto que es muy importante y necesario tener una formación adecuada y una base sobre la que trabajar. Pero también es importante lo que yo llamo "aprender a aprender". Una formación no solo tiene que darte una estrategia, unos parámetros de entrada y unos niveles de salida. Eso no sirve para nada.
¿Por qué? Porque estás esclavizado a un tipo de operativa, que te han impuesto, que tampoco te han explicado porque, y que ni tan siquiera sabes si a ti te va a funcionar o te vas a sentir cómodo.
Una formación debe ser algo integral, que te enseñe cómo debes pensar, trabajar, investigar. Un buen formador es quien, además de enseñarte un método, debe acompañarte en el proceso de aprendizaje y debe ayudarte a adaptar ese método a tu personalidad, a tus necesidades, en definitiva, a ti.
Si por ejemplo te enseñan una estrategia para operar la apertura del NASDAQ, y tu a esa hora no puedes estar en el mercado, ¿de que te sirve?
Lo ideal es que te enseñen a leer el mercado y a crear estrategias por ti mismo, a hacer un backtest, a tener mentalidad estadística. Es un trabajo duro que debes hacer (es mucho más sencillo copiar una estrategia de entrada), pero te aseguro que eso es lo que proporciona una mentalidad de trader.
En el siguiente vídeo encontraréis algunos consideraciones que os debéis plantear en vuestra operativa y cómo podéis ajustarla a vuestras necesidades.
Recordad que lo importante no es adaptar tu vida al trading sino adaptar el trading a tu vida.