El crecimiento económico al rojo vivo del tercer trimestre sigue en camino de desacelerarse bruscamente en los tres últimos meses del año, según la mediana de las previsiones a través de un conjunto de estimaciones recopiladas por CapitalSpectator.com.
Según los datos de hoy, se estima que la producción estadounidense se situará en el 1.0% en el cuarto trimestre. La previsión refleja un ritmo de crecimiento mucho más suave que el 4.9% del tercer trimestre, el mayor aumento en casi dos años.
La previsión mediana de hoy se sitúa ligeramente por encima de la anterior estimación.
Cuanto más tiempo persista la desaceleración, más fiable será la estimación en términos de alineación con la cifra real, cuya publicación por parte de la Oficina de Análisis Económico está prevista para finales de enero.
Todavía faltan la mayoría de las cifras económicas del cuarto trimestre, por lo que la previsión de hoy debe considerarse con cautela. Eso incluye suponer que la ralentización del crecimiento del PIB desencadenará una recesión en el último trimestre de 2023.
Como discutí ayer, aunque los argumentos a favor de un crecimiento más lento en el cuarto trimestre son cada vez más sólidos, las probabilidades de que se inicie una recesión definida por el NBER en los tres últimos meses de 2023 siguen pareciendo relativamente bajas.
Incluso si los EE.UU. evitan el inicio de una recesión en el cuarto trimestre, una desaceleración - si es sustancial - encendería las alarmas para 2024.
El mercado laboral será probablemente un indicador clave para rastrear el riesgo de recesión, aconseja Claudia Sahm, ex economista de la Reserva Federal y creadora de la regla Sahm, que utiliza las variaciones del desempleo para estimar la probabilidad de que haya comenzado una recesión económica.
Aunque el indicador Sahm de octubre no señala el inicio de una recesión, se acerca a un nivel que marca el comienzo de la contracción.
Sahm declara al Financial Times:
"Si pierdes el mercado laboral, pierdes a los consumidores, y si perdemos a los consumidores estamos acabados porque son dos tercios de la economía estadounidense".
"Después de una recesión tan severa, si somos capaces de mantener algo parecido a esto, entonces lo estamos haciendo bien. Si todo se viene abajo, entonces está claro que el reequilibrio no ha tenido éxito.Eso es totalmente posible y por eso vigilo el mercado laboral con mucha atención".