Parece que el mercado laboral en EUA se mantuvo sólido al cierre de 2023. Se generaron más plazas de lo que estimaba el mercado, la tasa de desempleo se mantuvo sin cambios ante una baja en la tasa de participación laboral. Mientras que los salarios tuvieron un avance anual mayor a lo esperado por el consenso.
Ahora, los mercados se preparan para recibir la cifra de inflación del cierre de año. El próximo jueves se publicarán las cifras de precios al consumidor.
El consenso espera que la inflación hay concluido el año con avance de 0.2% mensual y de 3.3% en términos anuales. En cuanto a la inflación subyacente, que excluye alimentos y energéticos, haya presentado un menor nivel en su variación anual, 3.8% frente al 4.0%.
Dicha cifra, ayudará a los inversionistas a especular sobre las posibilidades que existen de un alza de tasas por parte de la Reserva Federal.
En la próxima reunión de finales de enero, no se espera que la autoridad realice algún cambio. Sin embargo, las apuestas a que el primer recorte se lleve tan pronto como en la reunión de marzo ha estado latente. Tras el dato de empleo, las apuestas de redujeron a un 50%, pero un indicador de empleo en el sector servicios aumentó fuertemente las apuestas por un recorte hasta un porcentaje por momentos mayor al 70%.
Actualmente la probabilidad que le dan los mercados a que esto se materialice es de 66.5%, mientras que descuentan en 100% la probabilidad para mayo.
Esto contrasta con la opinión de los integrantes del comité de política monetaria de la FED, que de acuerdo a las últimas minutas publicadas las tasas podrían mantenerse elevadas durante un tiempo hasta que puedan observar una reducción constante de la inflación.
Aún existen muchos datos sobre empleo e inflación que ayudarán a alinear las expectativas de los mercados con los de la autoridad monetaria. Estamos iniciando el año por lo que de aquí a que se acerque la reunión de la FED de marzo falta conocer datos sobre precios y mercado laboral de al menos febrero y marzo.
Por lo que será importante seguir de cerca el comportamiento de estos indicadores. No cabe duda de que, 2024 será un año de viraje en la política monetaria de la mayoría de los Banco Centrales en el mundo y esta relajación podría comenzar para algunos bancos tan pronto como el primer trimestre del año, pero serán dependientes de datos económicos y el desempeño económico.
Por lo pronto, los mercados financieros aún no comienzan a tomar una tendencia clara. En particular, el peso mexicano se ha comportado con altibajos y actualmente se mantiene en terreno positivo cotizando alrededor de $16.90 spot, niveles no vistos desde agosto del año pasado.