La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) aumentó en 25 puntos base la tasa de fondo federales para ubicarla en el rango de 1,75%-2,00%. De acuerdo con la encuesta de Bloomberg, el mercado esperaba ese ajuste, de modo ya se había descontado su efecto y la atención estaba puesta en el discurso del Presidente de la FED, Jerome Powell.
Según el ente, el aumento se justifica debido a un fortalecimiento del mercado laboral, un ritmo de crecimiento económico sólido y la inflación oscilando cerca del objetivo de mediano plazo de 2,0%. Durante el último trimestre el PIB registró un crecimiento anualizado de 2,2%, explicado por un fuerte dinamismo en la inversión empresarial (+9,2%), de esa manera, el FMI estima para el 2018 un crecimiento económico de 2,9%.
Dicha solidez en la actividad se refleja en la tasa de desempleo, la cual se encuentra por debajo del 4,0%. Por su parte, la inflación medida por el Índice de Precios al Consumo (IPC) en mayo reportó una variación interanual de 2,7%, mientras que el Índice de Precios de Gasto del Consumidor (PCE) en abril se ubicó en 1,8%. En ese sentido, la convergencia hacia el objetivo inflacionario de la FED se acelera.
A partir de lo anterior, el mercado prevé que se den dos nuevos aumentos en el 2018, dejando un total de cuatro incrementos en el año. En gran medida, ello se explica por el dinamismo de la actividad económica, sumado a la nueva trayectoria de la tasa de fondos federales revelada por la Reserva Federal. En marzo se esperaba una trayectoria de la tasa de fondos federales de 2,1% para el cierre del 2018, mientras que ahora esa subió a 2,4%.