Un repunte de las infecciones y muertes por COVID-19 podría ralentizar el impulso hacia la retirada del estímulo monetario expuesto la semana pasada en las actas de la reunión de los responsables de política monetaria de la Reserva Federal a finales de julio.
El presidente de la Fed de Dallas, Robert Kaplan, que ha estado presionando para que se tomen medidas rápidas para reducir las compras de bonos de la Fed, reconoció el viernes que el impacto de la variante Delta podría obligarlo a ajustar sus puntos de vista.
"Se está expandiendo rápidamente", dijo en una comparecencia en la televisión, añadiendo que la nueva ola está retrasando la vuelta al trabajo e impactando en la contratación. Por el momento, Kaplan dice que mantendrá su postura al anunciar una reducción de las compras de bonos el próximo mes, pero un impacto importante en las previsiones económicas podría hacerle cambiar de opinión.
Más revelador tal vez es que la presidenta de la Fed de Kansas City anunció el viernes que cancelaba el simposio presencial de Jackson Hole esta semana y que se celebrará en remoto. El banco regional es el anfitrión de la reunión, que a menudo sirve para que los funcionarios de la Fed hablen del rumbo de la política monetaria. La reunión también se celebrará de forma remota el año pasado debido a la pandemia.
Las advertencias económicas indican que continúa la desaceleración
La evidencia de una desaceleración económica se ha detectado en todo tipo de datos, desde la disminución semanal de los controles de seguridad aeroportuaria hasta menos reservas en restaurantes a través de servicios online. Queda por ver qué impacto tendrá esta nueva cautela en las declaraciones del presidente de la Fed, Jerome Powell, que ha advertido regularmente sobre el impacto del COVID en la agenda de la Fed para la disminución gradual. No es probable que se apresure a anunciar ninguna fecha específica en esta situación tan voluble antes de la reunión de política monetaria de los días 21-22 de septiembre.
Las actas de la reunión de los días 27-28 de julio del Comité Federal de Mercado Abierto se han pasado rápidamente de moda. Parece a punto de haber consenso en cuanto a la reducción de las compras de activos este año.
"De cara al futuro, la mayoría de los participantes señalaron que, siempre que la economía evolucione en general como habían previsto, consideran que podría ser apropiado comenzar a reducir el ritmo de las compras de activos este año ya que consideran que el criterio de 'progreso sustancial’ del Comité se había cumplido con respecto al objetivo de estabilidad de precios y estaba muy cerca de cumplirse con respecto al objetivo de pleno empleo".
La trampa, por supuesto, es si la economía evolucionará como se espera, y las dudas parecen ir en aumento. Ya en julio, los responsables de la política monetaria señalaron "que la propagación de la variante Delta podría retrasar temporalmente la reactivación completa de la economía y lastrar la contratación y la oferta de mano de obra", según las actas.
El enfoque de cautela de Powell podría tener más influencia ahora que la secretaria del Tesoro, Janet Yellen —ella misma expresidenta de la Fed— ha expresado su apoyo a volver a nominar a Powell para el cargo. La decisión del presidente Joe Biden podría tomarse tan pronto como este próximo fin de semana.
La incertidumbre en torno al COVID está alimentando el deseo de mantener la mayor continuidad posible, con lo que favorece el renombramiento de Powell.
Yellen fue la primera presidenta de la Fed en no ser reelegida en décadas, ya que el expresidente Donald Trump rompió con la tradición bipartidista de mantener al presidente en su cargo si éste quería quedarse.
Powell reiteró su postura deliberativa la semana pasada. En una comparecencia virtual para educadores y estudiantes, Powell advirtió de que la pandemia ha cambiado permanentemente la economía.
"No estamos simplemente volviendo a la economía que teníamos antes de la pandemia. Tenemos que observar cuidadosamente cómo continúa gestionando la economía la pandemia y tratar de entender las formas en que ha cambiado la economía y cuáles son las implicaciones para nuestra política monetaria".
Los responsables de política monetaria de la Fed, así como los inversores, observarán de cerca los indicadores económicos en busca de señales de un nuevo impacto del Covid. Esta semana se publicarán datos sobre el sector manufacturero, las ventas de vivienda construida, los bienes duraderos y los ingresos y gastos personales.