El peso cerró la sesión con una depreciación de 1.09% o 22.8 centavos, cotizando alrededor de 21.25 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 20.9701 y un máximo de 21.2810 pesos, nivel no visto desde el 7 de diciembre. Esta es la segunda sesión consecutiva en la que el peso muestra una depreciación, acumulando un aumento de 36.2 centavos en los primeros dos días de la semana.
La depreciación del peso se da ante un fortalecimiento del dólar estadounidense, que avanzó 0.28% de acuerdo al índice ponderado. Lo anterior, como resultado de un aumento en la especulación en torno a la política monetaria de la Reserva Federal, lo que se debe a tres factores principales:
1. Se espera que, en su anuncio de mañana, la Fed acelere su ritmo en el recorte del programa de compra de bonos, lo que permitiría comenzar con el incremento en la tasa de interés en la primera mitad del 2022, antes de lo previsto.
2. En el anuncio de mañana será relevante la actualización de las proyecciones económicas, así como el diagrama de puntos. En la última actualización (22 de septiembre), 9 de 18 miembros del FOMC anticiparon al menos un incremento de la tasa de interés en 2022. De elevarse este número, es probable que el dólar se fortalezca tras el anuncio de política monetaria.
3. La publicación de la inflación al productor de Estados Unidos al mes de noviembre, la cual se ubicó en 9.6%, superando las expectativas del mercado y marcando un nuevo máximo histórico. El diferencial entre la inflación al productor y al consumidor se elevó a 2.8%, desde el 2.4% de octubre. Lo anterior indica que todavía existe un gran potencial para que se siga traspasando inflación a los consumidores dentro de los próximos meses, lo que eleva la expectativa de que la Fed muestre una postura más restrictiva.
Por los factores antes mencionados, se observó un incremento en el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años, que avanzó en 2 puntos base a 1.44%.
Al interior de la canasta amplia de principales cruces frente al dólar, 28 de las 31 monedas incluidas perdieron terreno, las divisas más depreciadas fueron de países emergentes. La moneda más depreciada fue la lira turca con 3.86%, seguida por el peso colombiano con 2.80%, el peso mexicano con 1.09%, el shekel israelí con 0.81% y la corona noruega con 9.73%.
En el mercado de capitales también se observó cautela, con la mayoría de los índices cerrando en terreno negativo. En Europa, el Eurostoxx 600 mostró una pérdida de 0.84%. Por su parte, en Estados Unidos el Dow Jones retrocedió 0.30%, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq mostraron pérdidas de 0.75% y 1.14%, respectivamente. En contraste en México, el IPC mostró una ganancia de 1.63% apoyado por la depreciación del peso, pues aumenta el atractivo de las acciones mexicanas para inversionistas extranjeros.
En la sesión, el euro tocó un mínimo de 1.1254 y un máximo de 1.1324 dólares por euro. Por su parte, el euro peso tocó un mínimo de 23.6464 y un máximo de 23.9590 pesos por euro.
Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 21.2455 pesos por dólar, 1.3226 dólares por libra y en 1.1257 dólares por euro.