Como ha sido la tónica de los últimos días, el peso mexicano opera con altibajos, pero en un rango acotado, con escasos catalizadores que le permitan consolidar alguna tendencia. Actualmente cotiza cerca del cierre de ayer alrededor de $19.88 spot, con los operadores centrados en determinar qué pasará con la inflación durante los próximos meses y cuál puede ser la postura que adopte la Reserva Federal (FED) en función de los posibles escenarios que se anticipan.
En este sentido, varios miembros de la FED han realizado intervenciones públicas para intentar calmar la preocupación de los inversionistas ante el esperado repunte de los precios en los próximos meses, que ya se constató en abril y ha puesto en guardia a los mercados financieros.
También es noticia la mejora en una décima en la revisión del PIB de México durante el 1T21, donde la caída anual quedó en 2.8%. En términos trimestrales, la expansión fue de 0.8%, en lugar del 0.4% reportado en la estimación oportuna. Con ello, por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $19.82 y $19.95 spot (el euro entre $1.220 y $1.226).
Por su parte, la calma también se ha instalado en las principales bolsas en el mundo, donde la mayoría operan en terreno mixto, con pocos acontecimientos con el potencial de cambiar la percepción y sentimiento del inversionista.
El mercado sigue muy pendiente de los próximos pasos de la Reserva Federal en cuanto a la inflación y la posible retirada de sus estímulos. Así, la atención se enfoca en las declaraciones de funcionarios del banco central estadounidense. Aunque el mensaje central de estos funcionarios ha sido en términos de que confirman su apoyo a mantener la política monetaria durante algún tiempo, al reiterar que las presiones inflacionarias en Estados Unidos no serán permanentes, hubo dos comentarios en el sentido de que en las próximas reuniones se llegará a un punto en el que tendrán que empezar a discutir la desescalada del ritmo de compra de activos. Estas declaraciones fueron del vicepresidente de la FED, Richard Clarida, y de la presidenta de la FED de San Francisco, Mary Daly.
En este sentido, aún no se han realizado progresos de un posible endurecimiento de los estímulos, y que la política monetaria está bien situada en la actualidad. Ambos funcionarios coincidieron en que esa discusión dependerá del flujo de información macroeconómica que se vaya registrando. La próxima reunión prevista del banco central es la que mantendrá los días 15 y 16 de junio.
En la sesión de hoy solo habrá comentarios de Randal Quarles, vicepresidente de supervisión de la FED, quien tiene dos intervenciones a las 9am y 2pm.
Por otro lado, en EUA continúan las negociaciones en Washington entre demócratas y republicanos con relación al plan de infraestructuras propuesto por el presidente Biden, aunque todo parece indicar que el Gobierno deberá apoyarse para su aprobación en los legisladores republicanos al persistir muchas diferencias entre ambos partidos, no sólo en términos cuantitativos (importe del plan), sino también en términos conceptuales, más cualitativos, ya que tampoco se ponen de acuerdo en lo que entra dentro del concepto de infraestructuras y en cómo se debe financiar el mencionado plan.
En México, el crecimiento del PIB del primer trimestre del año se revisó, en su variación trimestral, de 0.4% a 0.8%. En su comparación anual, la revisión fue de mejora en una décima, por lo que la tasa queda en -2.8% con cifras desestacionalizadas. Por grandes grupos de actividades económicas, el PIB de las Actividades Terciarias se redujo 3.4% y el de las Secundarias 2%, en tanto que el de las Primarias ascendió 2.6%.