El clima adverso en esos países impulsó los precios de la oleaginosa en el mercado de Chicago. Los contratos que vencen en el presente mes aumentaron casi 6 dólares por tonelada
En la primera rueda de negocios del año subió el precio internacional de la soja en el mercado de Chicago, como consecuencia del clima cálido y seco en regiones productivas de Brasil y la Argentina. Los contratos de la oleaginosa con vencimiento en el presente mes aumentaron USD 5,56 y cotizaron a USD 493,79 la tonelada.
Por el lado del maíz, los contratos con vencimiento en marzo de este año cayeron USD 1,30 y cotizaron a USD 232,30 la tonelada, con motivo de que la semana pasada se embarcaron cerca de 0,6 millones de toneladas de maíz en Estados Unidos, un 45% debajo del promedio semanal del último mes y muy por debajo de las expectativas del mercado, lo que muestra un dinamismo comercial bajista e incierto hacia adelante, profundizando las pérdidas
En el terreno de los cereales, el precio del trigo también operó a la baja por los efectos de ventas técnicas y a una merma en la oferta mundial. En Chicago, los valores de los contratos con vencimiento en marzo del presente año cayeron USD 4,47 y la tonelada cotiza a USD 278,50.
En la Argentina, en los primeros días del año y en medio de una profunda sequía que afecta a varias zonas productivas del país, se registró una secuencia de lluvias débiles y moderadas en varias regiones. Y si bien pudieron ocurrir tormentas aisladas y dispersas de más magnitud, prevalecieron regionalmente registros menores a 20 o 25 milímetros. Las lluvias se concentraron en el centro y norte de Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, y Santiago del Estero, entre otras provincias. Según los especialistas de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la región núcleo debería recibir entre 45 y 75 milímetros, para empezar a revertir el actual panorama.
Em un contexto de ausencia de lluvias, altas temperaturas y falta de humedad en los suelos, el maíz es el cultivo más afectado, donde el 75% de los suelos de la región núcleo ya está en condiciones de escasez de agua y sequía y el cultivo atraviesa su período crítico. Además se informó que existe un 25% del maíz en un estado de regular a malo, y ya hay 330.000 hectáreas pasaron a estado regular y 50.000 hectáreas se encuentran en malas condiciones.
Impacto de los precios
En un contexto de precios internacionales favorables, las exportaciones agroindustriales aportaron en 2021 un ingreso de divisas por 32.807.933.377 dólares. Se trata de un récord absoluto desde comienzos de este siglo. Así lo informó la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC). Además, en el pasado mes al país ingresaron unos 2.678.296.709 dólares, un 31,11% con respecto al precedente mes de noviembre.
Todo esto sucedió en momentos donde las reservas del Banco Central atraviesan un período crítico y la entidad sigue perdiendo dólares. Para principios del 2022, la mirada del Gobierno está puesta en los ingresos de dólares que generarán las exportaciones de los cultivos de invierno, que se están cosechando en estos momentos. El trigo podría aportar más de 4.000 millones de dólares en concepto de exportaciones.
Por último, la Bolsa de Comercio de Rosario proyectó para el 2022 una campaña agrícola con una siembra récord de 38,8 millones de hectáreas, la cosecha total de granos y oleaginosas alcanzaría los 144,5 millones de toneladas y divisas de la exportación por 38.400 millones de dólares. Si bien se espera que los precios de los commodities agrícolas “caigan levemente”, los serán compensados por un mayor venta externa en volumen. Además, habrá que seguir con atención la situación climática, en momento de una ausencia notoria de precipitaciones en las principal zonas productivas.