Octubre suele ser un mes desafiante para los mercados bursátiles, ya que en varias ocasiones se han registrado grandes “cracks” en este periodo. Aunque no siempre resulta en pérdidas, este año tanto Wall Street como la Bolsa de México cerraron el mes a la baja, destacando la caída del IPC.
En los últimos días, Wall Street se ha visto presionado por los resultados de algunas empresas del sector tecnológico, y la incertidumbre política, por lo que el Dow Jones perdió 1.34% en el mes, y acumula ganancia de 10.8% en el año. El S&P-500 cayó 0.99% en el mes y acumula ganancia de 19.6%, y el Nasdaq pierde 0.52% en el mes y acumula en el año ganancia de 20.5%.
El índice S&P/BMV IPC perdió en este mes de octubre el 3.5%, con lo que acumuló pérdida de 11.7% en los primeros diez meses del año.
Es normal que la incertidumbre en torno al proceso electoral en Estados Unidos genere volatilidad en los mercados, especialmente después de que los tres índices de ese país alcanzaran máximos históricos.
En México, predomina el escepticismo, posiblemente por el temor de que Donald Trump resulte electo, dado que ha amenazado con implementar medidas que podrían afectar al país. Además, los inversionistas están a la expectativa de las medidas y acciones de la presidente Claudia Sheinbaum.
La caída del índice de la Bolsa a mínimos del año en 50,661, lo pone en una situación compleja, porque técnicamente sigue a la baja, pero por otro lado, el indicador de fuerza relativa presenta niveles de sobre venta muy fuertes, por lo que consideramos que lo mejor es esperar a que regrese por lo menos a 51,000 para tomar posiciones.
El tipo de cambio parece haber frenado el alza, al cerrar el mes en $20.01 con ganancia diaria de 0.8% mientras que en el mes de octubre perdió 1.61%. Sin embargo, la presión todavía podría continuar.