La FED mantiene su discurso de mantener su política monetaria sin cambios por un tiempo prolongado. Esto a pesar de que el Banco Central mejoró su percepción sobre el desempeño económico de EUA, al mismo tiempo de que señaló que los riesgos han disminuido. Sin embargo, consideran que el proceso de recuperación y de normalidad por la pandemia aún está en etapa reciente, por lo que los riesgos no han desaparecido.
De forma unánime, la autoridad decidió mantener sin cambios la tasa de interés y su programa de compra mensual de bonos por 120 mil millones de dólares (el mercado financiero empieza a especular que la compra de bonos empiece a disminuir a finales de este año). Sobre la inflación, el banco central estadounidense reiteró su visión de que el reciente incremento refleja en gran parte factores transitorios.
Por lo pronto, el comunicado parece ser suficiente como para darle confianza a los inversionistas sobre ampliar sus apuesta en activos con mayor riesgo en el corto plazo. Esta impresión la volveremos a evaluar con el reporte del PIB del primer trimestre (jueves 29) y el reporte de inflación de abril (12 de mayo).
Previo a la decisión de la FED, el peso mexicano había borrado parte de las pérdidas de ayer, apreciándose hacia $19.95. Después de la publicación la moneda mexicana se apreció un poco más, hacia $19.90, niveles vistos en la mañana de ayer.
La atención ahora se enfoca en la conferencia de prensa de Powell.