Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, Managing Editor en 60 Second Inversor
La primera semana de marzo será otra semana muy ajetreada para los inversores. La invasión rusa de Ucrania sigue sacudiendo los mercados financieros, y las divisas y las acciones amplían pérdidas. Es imposible juzgar hasta dónde llegará el presidente ruso Putin en su intento de derrocar al Gobierno democráticamente elegido de Ucrania. Un gran convoy militar de más de 24 kilómetros se ha desplazado al perímetro de Kiev en preparación para un ataque más intenso. La economía rusa se verá muy afectada por las sanciones económicas, la caída del rublo y todas las medidas adoptadas por otros países para expulsar a Rusia del sistema financiero. La preocupación en torno a las consecuencias que esto tendrá para la economía mundial es una de las principales razones del descenso generalizado del rendimiento de los bonos y de las ventas de acciones a escala mundial.
Aunque se espera que suban los precios en todo el mundo debido a la invasión de Rusia, el reciente descenso del rendimiento de los bonos nos indica que los inversores creen que los banqueros centrales serán menos agresivos con la normalización de la política monetaria. El conflicto es entre Rusia y Ucrania, pero todos los países sienten una amenaza a su propia seguridad nacional. Hay mucha incertidumbre en este momento y eso podría hacer que los banqueros centrales sean más conservadores. Esta semana sabremos mejor cuál creen los responsables de la política monetaria que será el impacto del conflicto entre Rusia y Ucrania, empezando por la reunión del Banco de Canadá y la comparecencia del presidente de la Reserva Federal, Powell, ante el Congreso del miércoles.
El Banco de la Reserva de Australia podría mantener los labios sellados. No se espera que modifique la política monetaria y, aunque podría producirse una subida de tipos en algún momento de este año en vista de la reciente incertidumbre, podría optar por mantener inalteradas sus perspectivas hasta que se aclare el panorama. Por otro lado, todo apunta a que el Banco de Canadá subirá los tipos de interés. A principios de este mes, el mercado preveía un 70% de posibilidades de una subida de medio punto, pero ahora esas probabilidades han descendido hasta el 20%. La subida de un cuarto de punto es un hecho, y si optan por una medida menor, el USD/CAD podría volver a superar el nivel de 1,2750. Sin embargo, si se deja de lado el conflicto y se menciona la necesidad de adelantarse a la intensificación de las presiones sobre los precios, el USD/CAD debería situarse en el nivel de 1,26.
La atención se centrará en el presidente de la Fed, Jerome Powell. El banco central ha dejado claro que subirá los tipos en marzo, pero la invasión rusa complica las previsiones. La guerra en Ucrania no cambiará los planes de la Fed de subir los tipos dentro de dos semanas porque la inflación se encuentra en máximos de cuatro décadas, pero podría ralentizar su ciclo de ajuste. La gran pregunta de mañana es qué dirá Powell sobre las implicaciones económicas de la invasión. Si se centra en los precios altos y en la necesidad de adelantarse a ellos, el dólar debería ganar posiciones bajo la premisa de que el ciclo de ajuste seguirá su curso. Sin embargo, si Powell expresa alguna preocupación importante en torno a los problemas económicos, el rendimiento de los bonos del Tesoro podría caer más, arrastrando al dólar con él. Lo más probable es que Powell confirme que los tipos tendrán que subir, pero que también diga que aún es demasiado pronto para saber cómo afectará la guerra a la economía.
En esta ajetreada semana, la invasión rusa de Ucrania dominará los titulares y determinará los flujos de divisas, pero aparte de eso, los 5 principales acontecimientos a los que habrá que prestar atención serán la decisión sobre los tipos de interés del Banco de Canadá, la comparecencia del presidente de la Fed, Jerome Powell, el informe de empleo no agrícola de Estados Unidos y el IPC de la zona euro. También estaremos pendientes de los PMI chinos, el ISM estadounidense y el informe del PIB del cuarto trimestre de Canadá.