Un área de permanente fortaleza durante el invierno que atraviesan las criptomonedas ha sido la actividad de fusiones y adquisiciones en el espacio de las monedas digitales y el blockchain. Según la empresa global de criptofinanzas Circle, que ha presentado recientemente su “investigación de las criptomonedas en retrospectiva de Circle” inaugural de 2018, las fusiones y adquisiciones vinculadas al blockchain van a crecer más de un 300% interanual.
Dentro de esta estadística hay una tendencia particular que vale la pena destacar: el gran número de mercados de criptomonedas que están adquiriendo empresas que cotizan en bolsa y no forman parte del criptoespacio. Conocido como fusión inversa, las empresas que cotizan en bolsa están siendo acaparadas por empresas privadas de criptomonedas, para que la compañía pueda eludir el proceso complejo e intensivo de una OPV, convirtiéndose con la fusión en una empresa cotizada en bolsa.
¿Es esto un esfuerzo estratégico para diversificarse legítimamente, o un matrimonio de conveniencia entre dos entidades que no tienen nada en común, que permite que las empresas de criptomonedas compren su camino a los mercados?
No existe una respuesta simple. Jehan Chu, socio director de Kenetic y cofundador de la Social Alpha Foundation, una plataforma de subvenciones sin ánimo de lucro, ve este fenómeno como un ejercicio de resolución de problemas para algunos compradores:
"La adquisición de Coinbase de la startup antifraude Neutrino, la compra de Kraken de Crypto Facilities por unos 100 millones de dólares, o la compra de OKCoin de una compañía cotizada en la bolsa de Hong Kong por valor de 60 millones de dólares, las bolsas se están viendo sometidas a una gran presión regulatoria y tecnológica y buscan frenéticamente las compras que ofrezcan soluciones".
De hecho, señala Chu, las bolsas de criptomonedas buscan muy activamente fusiones inversas. "Las principales bolsas de criptomonedas tienen mucho efectivo. Y buscan urgentemente maneras de desplegar su capital para diversificar y eliminar el riesgo de su negocio".
Además, explica Chu, las empresas de criptomonedas buscan un mayor acceso al capital a través de los mercados públicos, y hay varias grandes empresas como OKCoin, Huobi y ANX siguiendo el ejemplo de Galaxy Digital que en 2018 adquirió sociedades cotizadas mediante la fusión inversa.
"Aunque esta ruta ha demostrado ser fructífera en otras industrias, el jurado aún está deliberando sobre el interés del mercado en las acciones blockchain a corto plazo", dice Chu.
La tecnología tradicional se plantea la implementación del blockchain
Hay otra área de actividad de fusiones y adquisiciones que también está ganando fuelle: las empresas de tecnología tradicionales quieren implementar el blockchain dentro de sus ecosistemas ya establecidos. Chandler Song, director ejecutivo de Ankr, una red de computación distribuida que aprovecha recursos inactivos en datos centros, señala:
"El año pasado se conocía que las ofertas relacionadas con las criptomonedas aumentaron más del 200% mientras se desplomaba el propio mercado de las criptomonedas. Parece que la industria está en una encrucijada y el ecosistema de blockchain parece bifurcarse, con muchos proyectos que utilizan este eterno mercado bajista para centrarse en las novedades técnicas".
Song destaca acuerdos recientes como el de la adquisición de Coinbase de la plataforma descentralizada de trading de ERC20 Paradex y Earn.com y la adquisición de Circle, respaldada por Goldman Sachs (NYSE:GS), de la bolsa de criptomonedas Poloniex. Song explica:
"El creciente interés de las empresas tecnológicas tradicionales también impulsa la actividad de fusiones y adquisiciones: Facebook (NASDAQ:FB) ha adquirido la startup de blockchain Chainspace. Gigantes de la industria como Amazon (NASDAQ:AMZN) y Microsoft (NASDAQ:MSFT) están avanzando en la introducción del blockchain en su infraestructura pública de computación en la nube pues se plantean la adopción empresarial.
Por no mencionar solo a las entidades más establecidas, las startups de criptomonedas ya existentes también tienen sus miras puestas en lo convencional. Trade.io ha adquirido la casa de corretaje británica Primus Capital Markets para ofrecer operaciones en forex respaldadas por BTC”.
Esquivar los obstáculos regulatorios; comprar legitimidad
Las firmas criptográficas también podrían estar tomando la ruta de la fusión inversa para esquivar los obstáculos regulatorios, así como para adquirir legitimidad tras dos años de titulares negativos sobre ciberataques a bolsas de criptomonedas y las operaciones turbias han contaminado el sector.
Ramón Ferraz, director ejecutivo de 2gether, una plataforma de banca respaldada por una de las Cuatro Grandes, la auditoria KPMG, dice que la palabra 'cripto' tiene una connotación negativa y algunas criptoempresas son muy conscientes de ello.
"Para una empresa de criptomonedas, es más fácil conseguir la aceptación popular mediante la adquisición de una participación en una empresa convencional, incluso empresas que cotizan en bolsa, como en el caso de las fusiones inversas".
David Wachsman, director ejecutivo de la empresa de servicios profesionales Wachsman, dice que todo esto es una evolución natural al ganar fuelle y madurar la aceptación de la clase de activos digitales. "Es probable que un diálogo más abierto entre entidades criptográficas y corporativas propicie que algunos gigantes del mundo empresarial se suban al ring de las fusiones y adquisiciones, pues la industria del blockchain se separa cada vez más de la volatilidad de los mercados de criptomonedas", añade.
"Esta transición es buena para todo el ecosistema de las criptomonedas", dice Stefan Neagu, cofundador de Persona.
"El ecosistema de las criptomonedas se está transformando y existe la necesidad de mejores y más sofisticados productos o servicios. [Las bolsas] tienden o bien a consolidar su posición como está haciendo Kraken, o a irrumpir en nuevas líneas de negocio ya que tienen una enorme cantidad de dinero aunque sea en forma de criptomonedas.
Las bolsas son un mediador, algo que la tecnología blockchain convierte en obsoleto al eliminar al intermediario. Y si hasta ahora las bolsas no hacían más que recaudar las cuotas, ahora tienen que repensar su estrategia y pisar con fuerza el acelerador de la innovación”.