Todo parece apuntar a que el banco central de Rusia mantendrá las tasas de interés ancladas en el 4.25%, mínimos históricos, cuando las autoridades fiscales publiquen su próxima decisión sobre las tasas de interés el viernes. Las tasas se han mantenido en ese nivel desde julio de 2020, en un esfuerzo por estimular la economía del país, que se contrajo no sólo a causa del coronavirus, sino también por el desplome simultáneo del precio del petróleo.
Rusia exporta más del 70% de su producción de petróleo, que, junto con el gas, representa más de un tercio del PIB del país.
El mes pasado, el banco central declaró que estaba terminando su ciclo de flexibilización monetaria. Esto no es nada menos que una dramática actuación de las autoridades del país, ya que el Banco de Rusia podría ser uno de los primeros mercados emergentes en subir las tasas de interés desde el inicio de la pandemia.
El cambio de política monetaria se produce tras haber ejercido una gran presión sobre la gobernadora Elvira Nabiullina para que comenzara a ajustarla tras dos años de tasas de interés en mínimos históricos. Los analistas de Morgan Stanley (NYSE:MS) y Citigroup (NYSE:C) son algunos de los que han estado advirtiendo que la reciente venta de rublos —resultado de nuevas amenazas de sanciones internacionales al Kremlin debido al envenenamiento y posterior encarcelamiento del activista Alexei Navalny— ha agravado la inflación entre la subida de los precios de los alimentos.
A tal efecto, los traders de derivados duplicaron con creces sus apuestas sobre la subida de las tasas de interés en los próximos tres meses, impulsando los bonos del Gobierno ruso a 10 años hasta nuevos máximos anuales. Además, se espera que los precios de la energía aumenten a medida que las economías globales se reactiven gracias a vacunas y estímulos, y eso podría proporcionar otro impulso a la moneda rusa.
Por último, desde una perspectiva técnica, la dinámica de la oferta y la demanda del propio rublo ha cambiado.
Aunque estamos hablando del rublo, hay que tener en cuenta que está emparejado con el dólar. Eso significa que si somos alcistas en el rublo, somos bajistas en el dólar frente al rublo.
El par completó un patrón de continuación del gráfico de cabeza y hombros, que encajaba con precisión dentro de su canal descendente. La MMD 50 está a punto de cruzar por debajo de la MMD 200, desencadenando un Cruce de la Muerte, demostrando la trayectoria actual. La MMD 100 se resiste al canal, señalando su importancia técnica. El actual repunte está encontrando resistencia en los dos mínimos anteriores, de enero y febrero.
Estrategias de trading – Configuración de posición corta
Los traders conservadores deberían esperar a que el precio vuelva a probar la integridad del patrón y que registren a continuación nuevos mínimos.
Los traders moderados esperarán un movimiento de retorno hasta un mejor precio, si no hasta la confirmación del nivel de resistencia.
Los traders agresivos podrían posicionarse en corto a voluntad, siempre que entiendan y acepten el mayor riesgo —de no esperar a una mayor confirmación— asociado a una mayor recompensa. La gestión del dinero es clave.
Este es un ejemplo de un plan comercial básico pero sólido.
Ejemplo de operación
- Entrada: 73.2500
- Orden de minimización de pérdidas: 73.5000
- Riesgo: 2500 pips
- Objetivo: 70.7500
- Recompensa: 25000
- Relación riesgo-recompensa: 1:10