Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
La última semana de negociación completa de 2020 será una semana muy movida. Hay cuatro reuniones de bancos centrales, y se publicará el PMI de diciembre, informes de empleo y el gasto de los consumidores de muchos países. De hecho, ni una economía importante escapa a la publicación de datos que influyen en el movimiento del mercado. Teniendo esto en cuenta, la atención se centrará en el dólar estadounidense. Los inversores siguieron vendiendo dólares el lunes, dando inicio a lo que podría ser la cuarta semana consecutiva de pérdidas. Los bajos tipos de interés, la diversificación de las reservas y la implantación de una vacuna mundial son algunas de las razones para la caída del dólar. Las acciones de Estados Unidos se consolidaron, pero sus movimientos récord de este mes reflejan la huida hacia los activos de riesgo, lo que concuerda con que el refugio seguro del dólar pierda su atractivo.
La próxima reunión de la Reserva Federal de esta semana es otra razón para la caída del dólar. Existe cada vez más convencimiento de que, después de la reunión de dos días del banco central, podrían aumentar las compras de activos y alargar el vencimiento de los bonos que están dispuestos a comprar. La Fed también podría cambiar a una orientación basada en resultados que vincule los ajustes a objetivos específicos. Aparte de estos cambios, el tono del presidente de la Fed, Jerome Powell, junto con los ajustes a sus proyecciones económicas, también contribuirá. No se esperan cambios en los tipos de interés. Para el banco central, el impacto de la implantación de las vacunas se sopesará en relación con el empleo y no nos sorprendería ver un poco de optimismo por parte de Powell incluso tras el aumento de las solicitudes de subsidio por desempleo. El dólar está profundamente sobrevendido y no le llevará mucho tiempo una cobertura corta. El dólar podría recibir un impulso de las ventas minoristas, que también se publicarán unas horas antes de FOMC. Los economistas creen que los gastos van a descender, pero los salarios han aumentado y el gasto online ha registrado máximos históricos, el riesgo es al alza. Por último, pero no por ello menos importante, todo el mundo estará pendiente también de los discursos sobre el estímulo.
El interés del mercado por los dólares estadounidenses determinará el ritmo de negociación de las divisas, pero hay suficientes datos a escala mundial para que las divergencias provoquen grandes movimientos de los cruces de divisas. Además de Estados Unidos, el Reino Unido, Japón y Suiza también publicarán sus anuncios de política monetaria. Las reuniones del Banco de Japón y del Banco Nacional de Suiza no suelen influir mucho en el movimiento del mercado, pero las previsiones del Banco de Inglaterra podrían tener un impacto significativo en la forma en el rumbo de la libra esterlina. Gracias a la promesa de los funcionarios del Reino Unido y de la UE de mantener las conversaciones más allá de su fecha límite anterior, la divisa británica ha sido la moneda más fuerte este lunes. Todavía no hay nada definitivo y los titulares podrían volverse negativos en cualquier momento, por lo que el Banco de Inglaterra seguirá siendo prudente. El Reino Unido publicará también los datos del PMI, la inflación, el empleo y las cifras de ventas minoristas, así que esta semana será excepcionalmente movida para la libra esterlina.
El euro reanudó su ascenso, registrando máximos de dos años y medio frente al dólar estadounidense. El debilitamiento generalizado del dólar estadounidense y el fortalecimiento de las cifras de producción industrial de la eurozona contribuyeron a impulsar el avance del par. Los PMI de la zona euro y el informe del IFO de Alemania se publicarán a finales de esta semana. Las recientes medidas de confinamiento deberían hacer descender los PMI, pero el componente de expectativas del Ifo podría aumentar ante el optimismo en torno a las vacunas. Incluso si lo hace, la decisión del Gobierno alemán de imponer un confinamiento a escala nacional hasta el 10 de enero es un gran problema para su economía y, a su vez, para el euro. Ya habían considerado el cierre de las tiendas tras las vacaciones de Navidad, pero el número de casos y muertes ha empeorado hasta el punto de que han concluido que es necesario ordenar el confinamiento de forma inmediata. Italia podría seguir su ejemplo, ya que el número de muertes supera ya las del Reino Unido.
En el caso de las monedas vinculadas a las materias primas, las publicaciones más importantes serán los datos empleo australiano, el PIB del tercer trimestre de Nueva Zelanda y el informe de inflación de Canadá. Las tres ampliaron su avance frente al billete verde el lunes y creemos que la mejora será generalizada. Tras la reapertura del estado de Victoria, Australia espera más aumentos del empleo. El tercer trimestre ha sido fuerte para muchos países y Nueva Zelanda no es una excepción. La inflación de Canadá también debería aumentar dado el fuerte aumento del componente de precios del PMI IVEY.