El informe de empleo de abril en Estados Unidos resultó ser una sorpresa desfavorable, con solo 175 mil empleos creados en comparación con las expectativas de 240 mil.
Además, la tasa de desempleo aumentó al 3,9%, superando las expectativas del 3,8%. Los salarios también experimentaron una ligera caída del 0,2%, frente a las expectativas del 0,3%, y un modesto aumento del 3,8% en los últimos 12 meses, en comparación con el 3,9% esperado. Este informe representa una desaceleración significativa en comparación con los últimos meses, lo que probablemente sea recibido con alivio por parte de la Reserva Federal.
Al examinar los resultados por sectores, observamos una mezcla de datos, con algunos sectores experimentando pérdidas de empleo, como la minería y la producción de madera, autopartes y fabricación de vehículos, tecnología de la información, y servicios profesionales. También se observa debilidad en el sector de hospitalidad y servicios, que solo creó 5 mil empleos, en comparación con su histórico como principal generador de empleo en la economía estadounidense en los últimos años.
Los sectores de salud y educación continúan mostrando fortaleza, siendo los principales impulsores del crecimiento del empleo, lo que contribuye a mantener un panorama laboral generalmente saludable.
En resumen, este informe alivia la presión sobre las preocupaciones de inflación derivadas del mercado laboral, y será interesante observar cómo evoluciona la situación en el futuro. Por ahora la bolsa celebra al bajar la probabilidad de que no se baje la tasa este 2024.