Tras el triunfo de Trump, las acciones chilenas han caído con bastante fuerza, alineándose al negativo rendimiento de los principales mercados emergentes, que han visto un fuerte flujo de salida ante la incertidumbre de las políticas del nuevo líder de EEUU.
En estos momentos, el IPSA debe enfrentar un soporte de corto plazo en la zona de los 4.100 puntos y posteriormente la zona clave de los 4.000 puntos.
Una caída bajo el piso de los 4.100 puntos entregaría las primeras señales de alerta de venta, mientras que la caída bajo el nivel psicológico de los 4.000 puntos confirmaría el fin del movimiento alcista iniciado a fines enero.
Al alza, la zona de los 4.300 puntos representa la principal resistencia técnica, por lo que un avance por sobre dicho nivel gatillaría un nuevo movimiento alcista hacia la zona de los 4.600 puntos.
Los indicadores técnicos RSI y MACD muestran claras señales de agotamiento, por lo que una caída bajo los 4.000 puntos podría generar una fuerte salida desde las acciones nacionales.