La bolsa chilena se recuperaba de sus mínimos extendiendo el rebote que se inició en torno a los 2.800 puntos, tras validar soporte en torno al nivel de retroceso de Fibonacci del 61,8% para el rally iniciado el 2002 y que finalizó en los 5.900 puntos en 2018.
Tras caer mas de un 50% durante dos años, la bolsa chilena muestra un rebote técnico por compras de oportunidad, lo que podría llevar al índice en busca de la próxima resistencia de los 3.500 puntos y posteriormente en los 4.200 puntos.
En las últimas correcciones la bolsa chilena demoró entre 12 meses a un año y medio en recuperar sus máximos anteriores, por lo que la violenta caída del IPSA podría haber encontrado soporte y bajo un horizonte de largo plazo se presenta como una atractiva oportunidad de inversión.