Las acciones chilenas siguen operando dentro de un acotado rango de trading, con una importante resistencia en la zona de los 4.300 puntos, que ha limitado cualquier intento de la bolsa local para alcanzar nuevos máximos en los últimos dos meses.
Tras el rally iniciado a fines de enero de 2016 y luego de acumular ganancias del 14% en el año, el principal índice accionario chileno muestra claros signos de agotamiento. Los indicadores técnicos RSI y MACD siguen entregando signos de una menor presión compradora, que podría gatillar una toma de ganancias mayor y presionar al IPSA por debajo de la zona de soporte clave representada por el nivel de los 4.100 puntos.
A la baja, una caída bajo los 4.100 puntos entregaría fuertes señales de venta en las acciones nacionales y debería presionar al IPSA en busca del próximo soporte en la zona de los 4.000 puntos y posteriormente hacia el piso técnico de los 3.900 puntos.
Mantenemos nuestra recomendación de estar fuera de la bolsa local hasta confirmar nuevas señales de compra con la ruptura de la resistencia de los 4.300 puntos.