En 2016 el oro tuvo finalmente un buen rendimiento del 10%, pero depurándose mucho la suba desde mediados de año. La recuperación del terreno perdido en los últimos meses se extendió en estas primeras dos semanas arrancó 2017 y con ella a los bonos emitidos por empresas productoras de oro y plata, que analizaremos en este reporte. Se espera que la demanda de oro siga en aumento, lo que sostendrá los precios, y no precisamente porque haya una elevada volatilidad de los mercados porque la misma se ubica en torno a 12% medida por el VIX (un valor bajo).
En lo que va de 2017, el precio del oro se apreció un 5%, mientras que unos de los activos sustitutos (Treasury a 10 años) se mantuvo invariante. El año pasado, todas las compañías han reducido sus márgenes y sus EBIT, mostrando también ROA negativos, producto de la baja en sus ingresos por la disminución del precio en el commodity y probablemente una sobreinversión en los años anteriores. Pero las empresas más importantes productoras de oro han cerrado 2016 con una clara recomposición en sus flujos de caja neta. Eso se debe a la menor inversión y CAPEX en busca de una fuente de financiamiento inmediata que tocó niveles mínimos de los últimos años.
La compañía que más se ha desendeudado en el último año es Barrick. Barrick y Newmont son las empresas que poseen una mayor liquidez. AngloGold es la que presenta el mayor porcentaje de relación deuda neta vs. capital. El mejor margen EBITDA lo muestra Newmont, seguido por AngloGold y, muy por debajo, Kinross. Para el inversor averso al riesgo recomendamos las obligaciones negociables de Anglo Gold, con vencimiento a 2020, una TIR de 3,75% y una duration de 3 años. Este título tiene un potencial de crecimiento en el precio de 2,5% si se alinea a la curva. Con mayor duration, una buena opción es la obligación negociable de Kinross con 2041, que posee un rendimiento de 7% y potencial del 17,5% si se alinea a la curva.