Las acciones globales se han mantenido prácticamente planas durante las últimas dos semanas, con el índice ACWI cerca de los máximos de septiembre de 2018, pero lejos de sus máximos históricos.
El volumen de operación ha ido disminuyendo considerablemente y los indicadores técnicos RSI y MACD siguen mostrando señales claras de divergencia bajista, por lo que una caída por debajo del soporte definido por los máximos de marzo, debería gatillar una fuerte presión bajista en los mercados globales.
Resumen: Alta probabilidad de cambio de tendencia y señal de venta.