El S&P 500 cerró con una ligera baja el jueves después de haber superado brevemente su máximo nivel.
El índice amplio S&P 500 superó durante la sesión su nivel récord de cierre de 3.386,15 unidades del 19 de febrero, justo antes de que los inversores vendieran acciones en previsión de lo que resultó ser la mayor caída de la economía de Estados Unidos desde la Gran Depresión.
La preocupación por las perspectivas de las empresas ha continuado a pesar de que la temporada de ganancias del segundo trimestre ha sido en su mayor parte más fuerte de lo previsto.
El número de estadounidenses que solicitó beneficios por desempleo cayó bajo la marca de 1 millón la semana pasada por primera vez desde la llegada de la pandemia del coronavirus al país, posiblemente porque la expiración de un subsidio adicional de 600 dólares desalentó a muchas personas de pedir la ayuda.
Técnicamente, el S&P500 se encuentra justo en torno a los máximos de años y desde junio que viene perdiendo momentum. Al igual que a comienzos de junio, el índice de Wall Street vuelve a tocar la banda superior de Bollinger para dos desviaciones estándar sobre una media móvil de 50 días, con algunos indicadores técnicos entregando señales de divergencia bajista.
A la baja, la zona de los 3.200 puntos representa el nivel de soporte clave de corto plazo, representado por la media móvil simple de 50 días, por lo que una caída bajo dicho nivel podría gatillar nuevas órdenes de venta.