Los mercados de petróleo han comenzado 2017 sumando más ganancias a las ya fuertes alcanzadas en diciembre. La atención durante las próximas semanas estará directamente en el compromiso de los productores de la OPEP y no-OPEP de reducir la producción. Las noticias de Kuwait y Omán, en ese sentido, han sido de apoyo hasta el momento, pero el camino hacia la recuperación del petróleo es probable que sea muy desigual.
Mientras el crudo está viendo un descenso de la volatilidad, no se puede decir lo mismo en el gas natural, que ha sido la materia prima con el mejor rendimiento en 2016 -subiendo un 59%. Sin embargo, ha sido la más penalizada en la sesión de hoy. El gélido frío que dio soporte al rally durante diciembre ha dado paso a una perspectiva de un clima más suave en las próximas semanas.
La perspectiva del recorte de la OPEP y el Y el clima frío intempestivo en los EE.UU. ayudó a impulsar un aumento en la demanda especulativa de futuros de energía comercializados en Estados Unidos durante diciembre. Durante la última semana de negociación completa de diciembre continuó la compra de los cinco contratos de energía. Las posiciones largas-netas en el petróleo crudo WTI, gas natural y ULSD alcanzaron un máximo de 2 años y medio, mientras que las posiciones largas netas RBOB se mantuvieron en un máximo de 22 meses.
El fuerte momentum en el crudo que hemos visto durante diciembre probablemente llevará al caprice del crudo al alza en el corto plazo, lo que supondrá un alivio a los fondos que tienen una posición especulativa de petróleo en WTI y Brent petróleo crudo de cerca de 900 millones de barriles. Estas posiciones ofrecieron un fuerte beneficio a finales de 2016, pero con un nuevo mes y un nuevo año por delante, las pérdidas potenciales no son tan aceptables en esta etapa del año.
Una posición récord de este tamaño es el mayor riesgo para los mercados petroleros durante las próximas semanas, pues podría provocar una corrección y podría se provocado también por señales de un engaño y/o un aumento continuo en la producción de países problemáticos que están exentos de recortes como Nigeria y Libia.
Vemos potencial alcista en el crudo Brent más allá de los 60 dólares por barril en este momento. La curva sobre el crudo Brent está viendo el precio más alto durante septiembre con el contrato LCOU7 negociando en 59,50 dólares por barril, comparado con los 57,50 dólares en el contrato LCOH7. Esto sucede suponiendo que los recortes de producción sólo durarán seis meses y que la producción de Estados Unidos probablemente aumentará su velocidad en el segundo semestre de 2017.
Por ahora, el tren del momentum no ha encontrado una razón para frenar y, por tanto, no hay incentivos para se bajen de dicho tren aquellos que poseen posiciones largas. Una ruptura por debajo de los 56,40 dólares por barril en LCOH7 y 53,40 en CLG7 vería la primera prueba de esta resolución.