El próximo domingo los ciudadanos griegos están llamados a las urnas para tomar una decisión que a cualquier persona de a pie le vendría grande. Creo, sinceramente, que las buenas gentes de Grecia no están capacitadas para adoptar semejante decisión, al igual que no lo estaríamos alemanes, daneses, austriacos o españoles.
Tampoco parece aventurado decir que el espíritu y resultado de esta votación será en clave política y no económica y que si el Gobierno heleno hace manifiesta campaña por el OXI (No en griego), hay un elevado número de posibilidades de que éste se imponga. Súmese a ello, además, el hecho de que en muy contadas ocasiones un líder político organiza un referéndum para obtener un resultado distinto al que desea.
El primer ministro, Alexis Tsipras, y su mano derecha en lo económico, Yanis Varufakis, argumentan que si el pueblo soberano dice “NO” lograrán reforzar su posición negociadora ante la troika sin ninguna implicación negativa. Los líderes europeos, por su parte, insisten en aguar la fiesta ateniense apuntando posibles efectos secundarios como la salida del euro. Cosas de la política.
“OXI” o “NAI”
Las últimas encuestas apuntan a que el NAI, el SÍ, gana terreno e incluso superaría ya al NO. Una semana de corralito está ablandando a la población Griega y las nada veladas advertencias que vienen de Europa están empezando a calar. En cualquier caso, la incertidumbre es elevada y habrá que estar preparados para el peor de los escenarios; una victoria del NO.
Ismael De La Cruz, analista bursátil y miembro del Instituto Español de Analistas Técnicos y Cuantitativos (IEATEC), coincide conmigo –somos mayoría en Europa, creo- en que la mejor de las noticias sería un SÍ.
Según argumenta, si ganase el NO implicaría que el pueblo apoya a Syriza y sus propuestas frente a la Unión Europea y Tsipras saldría reforzado moralmente, aunque reconoce que nadie sabe qué se le pasa por la cabeza al primer ministro griego.
"Primero envía una carta a la UE en la que acepta todas las condiciones y luego pide el NO en el referéndum. Se aprovecha de que Europa está dividida, de que algunos abogan por que sigan abiertas las negociaciones pese a un NO en el referéndum, como es el caso de Luis de Guindos. Una victoria del NO haría caer a las bolsas desde el lunes y estarían a expensas de si se reanudan las conversaciones o no".
Un NO hundiría las bolsas
En similares términos se pronuncia José Basagoiti, CEO de Trading Way of Life, sin dejar de confiar en que la coherencia se imponga y se logre el entendimiento, ya sea con un pacto previo al referéndum o con un Sí en el mismo.
Hemos visto las bolsas muy erráticas estos días, movimientos violentos sin clara dirección y volatilidad en forma de barridas y engaños que reflejan la alta tensión que se vive en Grecia. El tiempo corre y el miedo parece crecer más con cada minuto que pasa. Los griegos le empiezan a ver las orejas al lobo y parece que la masa y el propio Gobierno comienzan a darse cuenta de que unos y otros están condenados a entenderse.
Dejar de pagar la deuda cerraría los grifos a los bancos y la posibilidad de un corralito permanente asusta tanto a la población como a los mercados. Lógicamente, un NO hundiría las bolsas y dejaría a Grecia fuera de cualquier unión económica, política y social y en esas condiciones es difícil prosperar”.
Prohibido dejar posiciones abiertas
Quizás el mejor precedente de lo que pueda pasar en los mercados tras conocerse los resultados del referéndum lo tengamos en lo sucedido el pasado lunes. Los gaps de apertura en todas las plazas europeas fueron de los que hacen mucho daño a los incautos, tal y como me recuerda Joaquín Gual, CEO de Másquetrading.
“Lo de los Gaps del lunes ya lo venía comentando desde días atrás: ¡Mucho ojo con dejar posiciones abiertas! Y este lunes puede pasar lo mismo si sale el NO. Si hasta la fecha había que ser muy prudentes, de ahora en adelante habrá que serlo mucho más si cabe.
Aunque tal vez por eso la reacción de este lunes no sea tan exagerada como la del pasado. Muchos inversores han tenido experiencias muy negativas, con grandes pérdidas. Ya no quedan ganas de apostar, ahora se impone la prudencia y las manos fuertes esperarán a ver qué pasa”.
Niveles a vigilar
En cualquier caso Gual me apunta una serie de niveles a vigilar ante un hipotético NO en las urnas, y que podrían generar movimientos mayores de perder dichas cotas con volumen. Empezando por los mercados europeos, los 153 del futuro del Bund y los 10.850 del Dax equivaldrían a los 2.050 puntos del S&P 500, si se perforan dichos niveles, estaríamos hablando ya de palabras mayores.
En cuanto al EUR/USD, Joaquín Gual reconoce que este par le tiene muy despistado. Lateral, sí, pero en unas zonas muy amplias. Por abajo, si pierde 1,11 podría llegar a 1,08. Para irse largo, sin embargo, tendría que romper con alegría el techo de los 1,15, por dos veces tentado en lo que va de año, pero que todavía no ha logrado recuperar.
Y en relación a las materias primas, el petróleo parece bastante inmune a lo que pueda pasar en Grecia, bien sostenido por los 55 dólares, pero el oro ya es harina de otro costal. Si sale un NO en el referéndum, la subida estaría poco menos que garantizada, rumbo a 1.190 como mínimo rebote y luego hacia 1.205. Si supera esta cota, digamos que con pánico, luego habrá ya una zona clave 1.245 y mucho aire por encima hasta los 1.300.
Posibilidad alcista pese al NO
Más optimista se muestra, Enrique Soriano, profesor del Centro de Formación de Traders y fundador de ATEFIB, quien ve tanto en el “OXI” como en el “NAI” posibilidades alcistas para las bolsas europeas, tal y como recogía en su último análisis.
El problema, me señala, es que el resultado del referéndum sí que podría ser negativo para los ciudadanos griegos en función de su permanencia o no dentro del paraguas de la Unión Europea.
Para Soriano, el principal problema de fondo es que los dirigentes helenos prometieron algo que ellos mismo consideraban “posible” y que finalmente ha quedado patente que no lo era tanto.
“Si el pueblo les votó, lo hizo fundamentándose en unas "promesas", ahora, con el referéndum, lo que hace el Gobierno es pasarles su responsabilidad (cimentada en los votos recibidos) de nuevo a los votantes”.
Para apostar, mejor una casa de apuestas
Todavía pueden pasar muchas cosas hasta el domingo. El drama griego nos deja cada día un nuevo capítulo y el siguiente podría ser la declaración de inconstitucionalidad y suspensión del referéndum. ¡Quién sabe! Si algo ha demostrado hasta ahora el Ejecutivo de Tsipras es que son constantes en su inconstancia y que los giros de guión vistos hasta la fecha parecen más propios del argumento de Juego de Tronos que de una negociación al uso.
Pase lo que pase en los próximos días, una cosa parece estar clara. Si no es adrenalina lo único que se busca a la hora de invertir, tal vez lo mejor este fin de semana sea plegar velas, ver los toros desde la barrera y esperar al lunes para entrar. Tal vez para apostar a un resultado sea mejor ir directamente a una casa de apuestas.