En varias publicaciones de este blog se ha comentado la fortaleza que muestra el sector de servicios en Costa Rica y de cómo para este 2016 la perspectivas siguen siendo positivas. Ese desempeño obedece a que dicho sector se ve menos afectado por los problemas que inciden sobre la manufactura, como infraestructura deficiente o la apreciación cambiaria, pero también por el nivel de educación de la fuerza laboral. De acuerdo con la Coalición Costarricense de Iniciativas para el Desarrollo (Cinde) el país es líder en exportaciones de servicios en Latinoamérica, superando a economías como Chile y Brasil.
En 2015 esa actividad fue la que presentó el repunte más importante, creciendo en promedio un 10% si tomamos en cuenta los servicios financieros, los prestados a empresas y los de intermediación medidos indirectamente. Estas tasas no se evidencian en el crecimiento de la economía como un todo, debido a que áreas como agricultura y manufactura se desaceleraron y esas pesan más sobre la economía.
No obstante, el nuevo equilibrio anunciado por el Banco Central este martes señala que los datos actualizados cuentan una historia muy diferente y es el área de servicios la que más pesa en la economía costarricense, por lo que es de esperarse que como un todo la economía en 2015 haya crecido más de lo señalado.
Medios locales reportaron recientemente que la operación de Intel (O:INTC), ahora más especializada, alcanzó de nuevo los 2.000 empleados, convirtiéndose en uno de los mejores ejemplos del cambio que está experimentando la economía costarricense.
Aunque datos del Producto Interno Bruto (PIB) más recientes no se han dado a conocer, se espera un avance y, por lo tanto, una mejor en las razones de deuda del país, debido a que esas usan como denominador dicho indicador, que ahora, sería un poco más grande.