Tras alcanzar máximos en torno a los 5.200 puntos, el índice tecnológico Nasdaq muestra claros signos de debilidad y de agotamiento en el movimiento alcista que se inició el 2009 en torno a los 1.400 puntos.
Tras siete años de tendencia alcista, el índice Nasdaq acumula un retorno cercano al 350%, por lo que en cualquier momento podríamos ver el estallido de la nueva burbuja punto com.
El indicador técnico RSI viene mostrando señales de debilidad desde el 2014, sin embargo el índice siguió subiendo en busca de sus máximos históricos pero con una fuerte caída en los volúmenes de transacción.
En estos momentos, el Nasdaq mantiene un importante soporte en la zona de los 4.300 puntos (mínimos de enero), por lo que una caída por debajo de dicho nivel confirmaría el cambio de tendencia en el índice tecnológico, dando inicio a un fuerte proceso correctivo.
El escenario actual representa una buena oportunidad para tomar una posición corta en el Nasdaq (venta corta: operación que apuesta a la caída de un activo).