Esta semana, la atención de los mercados financieros se enfocará en Europa, con la reunión del Banco Central Europeo, la espera de si Rusia reanudará el flujo de gas a través del gasoducto Nord Stream 1, mientras sigue abierta la crisis política en Italia.
Reunión del BCE
La cita más relevante de esta semana para los inversionistas será la reunión que celebra el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) el próximo jueves 21 de julio, encuentro en el que se espera que incremente por primera vez en más de una década sus tasas de interés de referencia con objeto de combatir la elevada inflación.
El comunicado con los resultados se dará a conocer a las 7.15am (del centro de México) y, media hora después, la presidenta Lagarde ahondará en la decisión en una conferencia de presa.
En principio, el mercado descuenta que el BCE comenzará el proceso de alzas de sus tasas con un incremento de sólo un cuarto de punto porcentual, para proceder en septiembre a un incremento por un importe superior, probablemente 50pbs. Al menos así lo han estado manejando las distintas declaraciones de funcionarios de la autoridad europea y las minutas de la última reunión.
Además, se espera que den a conocer las líneas maestras de su nueva herramienta “anti fragmentación”, con la que intentará evitar una fuerte escalada de las primas de riesgo de los países de la Eurozona que presentan mayores desequilibrios fiscales, tales como Italia, España, Portugal o Grecia. En este sentido, es muy probable que el BCE no ofrezca demasiados detalles sobre cómo va a funcionar la mencionada herramienta y sobre la condicionalidad que su uso conllevaría para los países que requieran de su aplicación.
El objetivo del BCE sería que la mera existencia de dicha herramienta sea suficiente para evitar turbulencias en los mercados.
Nord Stream 1
El mismo día, Rusia debe reanudar el suministro de gas a través del gasoducto después de un cierre de mantenimiento de 10 días. Problemas o demoras en su vuelta a la actividad, supondría una presión adicional sobre los costos de energía y elevaría la incertidumbre de cara al invierno europeo.
Además, existe la preocupación de que Rusia podría utilizar el gas como arma contra Occidente, lo que podría tener un impacto muy negativo en la economía de la región y, especialmente, en dos de las mayores economías de la zona, tales como la alemana o la italiana, muy dependientes del gas ruso. Lo anterior, se traduciría en mayores temores a una recesión económica de la Eurozona.
Crisis Política en Italia
En Italia, los inversionistas estarán atentos para ver el destino del primer ministro Mario Draghi, quien se dirigirá al parlamento el miércoles después de que el presidente del país rechazara su renuncia.
Draghi seguirá siendo el primer ministro de Italia al menos hasta el próximo miércoles, cuando acuda al Parlamento para verificar si cuenta con la mayoría suficiente, lo que "congela" unos días la crisis de Gobierno provocada por la falta de apoyo en el Senado de uno de los socios más importantes de su coalición, el Movimiento Cinco Estrellas (M5S).
Draghi comunicará entonces si está dispuesto a continuar al frente del Ejecutivo. El actual impasse lo ha desatado el Movimiento Cinco Estrellas de Giuseppe Conte, quien rechazó apoyar un proyecto de ley de ayudas del Gobierno contra la inflación por considerarlo insuficiente. Los partidos políticos italianos se preparan para una posible convocatoria de elecciones anticipadas, en caso de que no se logre convencer a Draghi de seguir en el puesto.
Diversas fuentes de los partidos han confirmado que se han lanzado los preparativos para una posible contienda electoral que se celebraría el 25 de septiembre.
Comentario final
Estos eventos en Europa tendrían implicaciones para la moneda mexicana. Si terminan resolviéndose a favor o en línea con lo esperado, el peso podría seguir recuperando terreno y recortando parte de las pérdidas de semanas previas y; viceversa.
Sin embargo, no hay que olvidar que el aumento de la inflación, el temor ante una posible la recesión, el riesgo de que la temporada de resultados sea mala, son elementos con incidencia en el precio de los activos, por lo que es altamente probable que los mercados sigan volátiles.