Wall Street cerró con caídas el lunes arrastrado por el sector energético, que retrocedió en coincidencia con el descenso de los precios del petróleo, mientras que los resultados trimestrales de compañías como Perrigo y Xerox (NYSE:XRX) también presionaron al mercado.
Con el índice S&P 500 en alza en ocho de las últimas 10 semanas y acercándose a un máximo establecido hace casi un año, los operadores no encuentran muchas razones para empujarlo más arriba ante resultados decepcionantes y el fantasma de tasas de interés más altas sobrevolando los mercados.
El promedio industrial Dow Jones perdió 26,51 puntos, o un 0,15 por ciento, y cerró en 17.977,24 unidades, mientras que el S&P 500 bajó 3,79 puntos, o un 0,18 por ciento, a 2.087,79 unidades. El índice Nasdaq Composite cayó 10,442 puntos, o un 0,21 por ciento, a 4.895,786 unidades.
Las utilidades del primer trimestre de componentes del S&P 500 habrían caído 7,3 por ciento respecto al año anterior, de acuerdo a datos de Thomson Reuters I/B/E/S. De las 135 compañías que han reportado, el 59 por ciento informó ingresos por encima de las estimaciones, muy cerca del promedio de los últimos años.
Técnicamente, el índice S&P 500 muestra claros signos de agotamiento, por lo que una caída bajo los 2.080 puntos debería gatillar una fuerte presión bajista en el índice.