por Mercedes del Signo del Rio
Infosel, diciembre. 26.- El gobierno de México presentará un recurso ante la Corte Internacional de Justicia por posibles violaciones al respeto de la misión diplomática mexicana en Bolivia, donde grupos de las fuerzas armadas y de la policía están realizando rondines atípicos de vigilancia.
México decidió dar asilo en la embajada del país en Bolivia a ciudadanos de esa nación sudamericana, que llegaron a solicitar protección tras la renuncia del entonces presidente Evo Morales --que algunos consideran fue resultado de un golpe de Estado--.
Días después el gobierno boliviano notificó que cuatro de las personas refugiadas en la embajada mexicana tenían órdenes de aprensión en su contra, por lo que el 23 de diciembre fueron enviados alrededor de 90 elementos de seguridad a custodiar la instalación de la misión diplomática.
Incluso, funcionarios diplomáticos bolivianos acusan a México de interferir en asuntos relacionados a esa nación, debido a que el gobierno de López Obrador dio asilo político durante más de un mes a Morales y a algunos de sus colaboradores en el gobierno.
Para México, sin embargo, esas acciones son violatorias a los tratados diplomáticos internacionales, por lo que acudirá a la Corte Internacional de Justicia, el principal órgano judicial de las Organización de las Naciones Unidas, debido a que no obtuvo respuesta aclaratoria por parte del gobierno que encabeza actualmente Jeanine Áñez.
"¿Qué es lo que planteamos? Que se preserve y se respete la integridad de las instalaciones y de quienes están al interior de esas instalaciones que se consideran parte del territorio mexicano", dijo Ebrard Casaubón, el secretario de Relaciones Exteriores, en rueda de prensa.
El canciller dijo que, a pesar de esta amenaza por parte del gobierno boliviano, México no planea retirar al personal diplomático de su sede en ese país, ya que residen en Bolivia alrededor de 10 mil connacionales que no pueden ser abandonados.
Ebrard Casaubón agregó que está recurriendo a la comunidad internacional en búsqueda de apoyo ante el asedio sin precedentes de las instalaciones diplomáticas mexicanas en Bolivia.
"Estamos estableciendo conexión con toda la comunidad internacional porque ni aún en los peores momentos de los golpes militares de los años setenta y ochenta se puso en riesgo la integridad de las instalaciones de las embajadas de México o de sus residencias", agregó Ebrard.
