por Patricia Guerrero Medina
Infosel, abril. 24.- Volaris, la segunda mayor aerolínea del país, prepara una licitación para la compra de turbosina, un insumo que en los últimos años ha incrementado su costo, lo que ha deteriorado las finanzas de las aerolíneas mexicanas y en general, a nivel mundial.
El concurso, que es preparado por la aerolínea al menos desde inicios de este mes, contemplaría a proveedores privados y a Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), la empresa estatal que hasta el año pasado tenía la exclusividad en el mercado de este combustible.
"Como anunciamos previamente, ayer reunimos a ASA, Bristish Petroleum ( BP (LON:BP)), Repsol (MC:REP) y a World Fuel Services para entregarles las bases de licitación de combustible en el mercado mexicano", escribió Enrique Beltranena, director general de la aerolínea, en su cuenta personal de la red social Twitter.
Repsol ya tiene autorización para comercializar turbosina en la terminal aérea de Cancún, la segunda más importante del país, al igual que BP, quien además también puede venderla en el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM). World Fuel Services, en tanto, la comercializa en el aeropuerto de Monterrey, mientras que ASA tiene presencia en todas las terminales.
Con esta medida, Volaris, que el viernes presentará sus resultados financieros del primer trimestre, busca hacer frente a los elevados costos que representa en consumo de combustible para sus operaciones.
La compañía registró un precio promedio del galón de turbosina de 49.1 pesos en el cuarto trimestre de 2018, 32.8% más en comparación con el mismo periodo de 2017, de acuerdo con su reporte trimestral.
Claro que no es la única aerolínea en tomar esta medida. En marzo, Viva Aerobus, la principal línea aérea de bajo costo de México, dijo que ya adquiere turbosina a proveedores privados en dos o tres aeropuertos del norte del país; mientras que las extranjeras British Airways e Iberia también hacen lo propio.