Por Laura Sánchez
Investing.com - La Unión Europea trata este martes de llegar a un acuerdo en cuanto a los objetivos de reducción de gas para no depender del gas ruso este próximo invierno.
“Los recortes de demanda que se aplicarán este invierno están inicialmente en el -15%, y podríamos ver cierta flexibilidad tras el rechazo frontal de varios países a acatar este plan, lo que podría resultar en determinadas exenciones (menor reducción de demanda, prórrogas) a países del Sur (incluida España) y del Este, así como islas no totalmente conectadas a la red europea”, explican en Renta 4 (BME:RTA4).
“Esta flexibilidad se basaría en la menor dependencia del gas ruso así como en la capacidad de interconexión de ciertas economías que les permita ayudar a otros países europeos en peor situación”, añaden estos expertos.
Y es que, según apuntan en Link Securities, “el mayor riesgo para la economía del conjunto de la Eurozona es que Rusia utilice el gas como arma contra Occidente y termine por cortar por completo el suministro de este combustible a Centroeuropa”.
Estos analistas destacan la relevancia de que ayer Rusia “avisara” nuevamente a Alemania de lo que puede ocurrir. La compañía rusa Gazprom (MCX:GAZP) anunció que reduciría a la mitad las exportaciones de gas a través del gasoducto Nord Stream 1 a Alemania a partir de mañana miércoles, a sólo el 20% de la capacidad total -actualmente está operando al 40%-.
“La decisión de Gazprom vuelve a aumentar la incertidumbre sobre los flujos de gas ruso hacia Europa con las implicaciones que esto puede tener a nivel de racionamientos con su consiguiente impacto en el crecimiento económico europeo y especialmente de Alemania”, coinciden en Renta 4.
“Y no sólo a nivel crecimiento, sino también en términos de inflación: tras la noticia, los futuros del gas europeo subían más de un 10%, añadiendo presión adicional sobre unos niveles de precios ya de por sí en niveles muy elevados”, añaden.