por Dassaev Rodríguez Ramírez
Infosel, abril. 16.- Moody's Investors Service, una de las tres calificadoras de riesgo crediticio más importantes a nivel mundial, dijo que ve bien el plan del gobierno de destinar recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP) a la empresa petrolera estatal Petróleos Mexicanos, para que pueda hacer frente sus obligaciones financieras de este año.
La semana pasada, el secretario de Hacienda y Crédito Público, Carlos Urzúa, dijo en un foro organizado en la ciudad de Nueva York que el gobierno mexicano estaba considerando usar 100 mil millones de pesos (cinco mil 331 millones de dólares) del FEIP para apoyar financieramente a la mayor empresa del país.
Para hacerlo, el gobierno mexicano deberá primero modificar la ley para poder echar mano de los recursos del FEIP.
Actualmente Pemex, como también se conoce a la empresa estatal, enfrenta una delicada situación operativa y financiera por la caída de su producción de crudo a lo largo de los últimos 15 años y por su deuda de más de cerca de 106 mil millones de dólares.
Frente a estas condiciones, la petrolera podría sufrir en unos meses una degradación crediticia que, de ocurrir, le haría perder la categoría de grado de inversión y enfrentar mayores costos financieros.
Ante esto, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador estudia la idea de emplear, por este año, cerca de un tercio de los fondos que tiene el FEIP para ayudar a la petrolera a pagar las deudas que tiene este año.
Si eso ocurre, podría aliviar un poco el panorama pesimista que enfrenta la compañía estatal.
"Esta medida, más la condonación de impuestos otorgada a Pemex por tres mil millones de dólares a lo largo de cuatro años, permitirá cubrir las necesidades de financiamiento de 2019 una vez que el gobierno transfiera los recursos del FEIP", dijo Jaime Reusche, vicepresidente senior para América Latina de Moody's, en reporte.
El FEIP fue creado para que el gobierno de México contara con recursos de emergencia en caso de que una caída abrupta de los precios del crudo que afectaran sus finanzas.
La calificadora advirtió que en caso de que Pemex no incremente su producción podría requerir nuevamente apoyos adicionales del gobierno en 2020, algo que podría afectar la calificación crediticia soberana de México, que actualmente está en un nivel de A3 para esa agencia.
"De no llegarse a dar una disminución en los costos de acceso a los mercados financieros y un incremento en la producción de crudo, Pemex volverá a requerir apoyos adicionales a partir de 2020, convirtiéndose en una carga para el erario público", agregó Reusche.
En febrero, Pemex logró frenar el declive de su producción petrolera registrar un aumento de 4.9% con respecto a enero, al pasar de 1.64 millones de barriles diarios en el primer mes del año a 1.72 millones en el segundo.
El incremento de la producción de crudo nacional --el mayor en los últimos 16 meses, o desde que subiera 9.9% en octubre contra septiembre de 2017--, permitió dejar atrás los decepcionantes datos observados en enero, cuando Pemex tuvo su peor nivel de extracción en 40 años.
Sin embargo, es incremento debe repetirse a lo largo de este año para que las agencias calificadoras mejoren la perspectiva futura de la petrolera, lo que a la postre podría eliminar la amenaza actual de una degradación crediticia a grado especulativo o "basura".