Por Laura Sánchez
Investing.com - Mientras Wall Street cerraba ayer con subidas tras el compromiso del Gobierno estadounidense y del banco central del país en apoyar la economía, en Europa no ocurría lo mismo. Tras 6 horas de reunión por videoconferencia, todo quedó en papel mojado.
“Tras tres días de tregua, los principales índices europeos abren a la baja. Uno de los principales motivos para ello es la nueva decepción que protagonizaron los líderes de la Unión Europea (UE) que, como es habitual en esta región infectada de burocracia, no se alcanzaron acuerdos concretos para combatir el impacto de la crisis sanitaria. Amagaron, como siempre, pero no terminaron de dar ningún golpe concreto”, critican en Link Securities
Algo que, según estos expertos, “era previsible, dado el diferente enfoque con el que los principales países de la región han afrontado la pandemia y su impacto económico”.
“Decepción en el mercado por la reunión de ayer de la Eurozona sobre el plan de rescate. Vuelven las peleas entre Norte y Sur, vuelven las historias de la troika y la austeridad y encima se citan para dentro de 15 días, como si no tuvieran prisa con la que está cayendo. Increíble”, reitera José Luis Cárpatos, CEO de Serenity Markets.
“No hubo un consenso sobre la utilización del MEDE ni sobre la mutualización de la deuda a través de los coronabonos. La propuesta de Italia y España, con apoyo de Francia, de emitir deuda conjunta y con garantías mutuas fue bloqueada por el frente alemán formado por Alemania, Holanda, Austria y Finlandia y Angela Merkel diciendo que los coronabonos no son una opción. Mientras, Italia lideró el bloqueo para hacer solamente uso del MEDE con respaldo de España”, comentan en Renta 4 (MC:RTA4).
“Por el momento, se abre un nuevo periodo de incertidumbre para ver si son capaces de alcanzar algún acuerdo conjunto que supondría reafirmar el proyecto de la Unión Europea como una unidad tras el Brexit”, añaden estos analistas.
Banca March coincide en señalar que ha quedado de manifiesto “la división de opiniones que existe dentro de la UE. Por una parte, un grupo de países defiende una actuación común para enfrentarse a la pandemia, mientras que el otro grupo se muestra reacio a compartir los costes, manteniendo que se debe esperar a analizar el auténtico impacto que tendrá la situación sobre la economía europea”.
Qué esperar
“La volatilidad continúa a niveles muy elevados en términos relativos históricos, lo que siempre es un indicador de que, en cualquier momento, pueden volver las tensiones a los mercados. Bien es verdad que tanto los bancos centrales, como ayer volvió a recordar el presidente de la Reserva Federal, Powell, como los distintos gobiernos parece que han aprendido mucho de la pasada crisis financiera y han actuado con celeridad, el problema es que nos enfrentamos a un escenario nunca antes visto en el que las economías, que mal que bien, venían creciendo, se han parado totalmente de golpe, por lo que es casi imposible saber a qué ritmo y cuándo van a ser capaces de arrancar. Lo que sí es seguro que cuanto más tiempo estén paradas la recuperación será más lenta y difícil, algo que los mercados terminarán por ‘poner en precio’ cuando los analistas e inversores tengan algo más de visibilidad”, reiteran en Link Securities.
“Seguimos sosteniendo que, aunque los bancos centrales continúan dispuestos a seguir uilizando toda su munición, hasta que no haya una moderación en la curva de contagios será difícil que las bolsas generen un suelo sostenido”, concluyen en Renta 4.