Investing.com - La cotización de los futuros del oro supera los 1.300 dólares por onza por primera vez desde el pasado 9 de noviembre de 2017, fecha en la que Donald Trump se alzó con la victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
El preciado metal se beneficia así de la búsqueda de activos refugio de los inversores tras el atentado terrorista en el centro turístico de Barcelona y trata de consolidarse sobre la barrera psicológica de los 1.300 dólares, tras alcanzar un máximo en la sesión de 1.306,14 dólares por onza.
Además de por el atentado reivindicado por el denominado Estado Islámico, los precios del metal de los dioses sacan partido de la debilidad del dólar, todavía lastrado por el abandono masivo de los directivos de grandes empresas estadounidenses de dos comités asesores impulsados por el presidente Trump.
La desbandada de los directivos de las grandes compañías se produce como consecuencia de la enésima polémica surgida en torno a la figura del mandatario estadounidense y a su forma de abordar los sucesos de violencia racial registrados en Virginia el pasado fin de semana.
Esta nueva oleada de críticas que afectan de nuevo al presidente Trump desde el seno de su propio partido hace que el mercado se replantee la capacidad real que tendrá el líder de la primera economía mundial para sacar adelante su agenda política, en la que se incluyen importantes planes fiscales y de impulso económico que gozaron de gran aceptación por parte de los inversores.
Así las cosas, la cotización del oro da un nuevo paso al frente y vuelve a superar la barrera de los 1.300 dólares que no sobrepasaba desde el día siguiente a las elecciones. Aquel nueve de septiembre, miércoles de extrema volatilidad en el mercado, los futuros de la materia prima se movieron en un rango de casi 50 dólares, desde un mínimo de 1.270, hasta un máximo intradía de 1.318,6 dólares por onza.