LA HABANA, 19 feb (Reuters) - La guerrilla colombiana de las FARC aseguró el viernes que no violó las reglas acordadas en el diálogo de paz que mantiene con el Gobierno y rechazó el señalamiento de que había hecho política con las armas en un poblado del país sudamericano.
La reacción de las FARC, que desde hace más de tres años negocia con el Gobierno de Juan Manuel Santos un acuerdo que ponga fin al conflicto más violento y viejo de Sudamérica, ocurre luego de que su contraparte decidió suspender las visitas autorizadas a sus negociadores a los campamentos rebeldes para informar sobre los avances del proceso de paz. el manido argumento del proselitismo armado, se pretende imponer el aislamiento de nuestra delegación y la prohibición de interactuar con los distintos sectores de la sociedad interesados en conocer los desarrollos del proceso", dijeron las FARC en un comunicado.
El Gobierno suspendió las visitas bajo el argumento de que la guerrilla violó las reglas acordadas luego de que dos de sus representantes, Iván Márquez y Joaquín Gómez, entraron el jueves al pueblo de El Conejo, en el departamento de la Guajira, escoltados por guerrilleros uniformados y armados.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) aseguraron que no violaron los acuerdos consensuados en la mesa de diálogo de La Habana. Se "ha desatado una injustificada polémica", afirmó. De inmediato invitó "al Gobierno Nacional a trabajar para superar este impase", según el texto.
El jefe del equipo negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, recordó que desde el 2015 se autorizaron cinco visitas para que representantes de las FARC entraran a los campamentos a hablar sobre los diálogos de paz, que buscan acabar con un conflicto armado que ha causado más de 220.000 muertos.
Las FARC y el Gobierno de Santos discuten actualmente acerca del cese bilateral y definitivo del fuego -que incluye zonas de concentración para la guerrilla con la supervisión de Naciones Unidas- y los mecanismos de refrendación de los acuerdos.
(Reporte de Nelson Acosta; Editado por Silene Ramírez)