Tras su difícil actuación en el debate del pasado jueves, el presidente Joe Biden está considerando una serie de compromisos públicos para reforzar su apoyo entre los votantes. Los posibles actos, destinados a tranquilizar a los demócratas, podrían incluir un ayuntamiento, entrevistas individuales con destacados periodistas de Washington o una rueda de prensa en solitario, según fuentes conocedoras de las conversaciones.
El Presidente, de 81 años, se enfrenta a presiones dentro de su partido para que reconsidere otra candidatura presidencial, después de que su reciente actuación en los debates suscitara dudas sobre su capacidad para ejercer el cargo. Julio será un mes crucial para Biden, no sólo por la dinámica interna del partido, sino también por la importante reunión de líderes mundiales en Washington, que se centrará en cuestiones críticas como el actual conflicto en Ucrania.
A medida que se acerca la Convención Nacional Republicana, a mediados de julio, en la que se espera que Donald Trump sea nominado, el gobierno de Biden es muy consciente de la necesidad de abordar las cuestiones sobre la idoneidad del Presidente para otro mandato. Matt Bennett, de Third Way, hizo hincapié en la importancia de la visibilidad de Biden, sugiriendo que es fundamental comprometerse directamente con el público en diversos foros.
La Casa Blanca y la campaña de Biden, que habían restringido las entrevistas individuales en televisión y no habían concedido entrevistas a los principales medios de comunicación desde su toma de posesión, están reconsiderando ahora esta postura. Comentaristas políticos y organizaciones de noticias, incluido el consejo editorial del New York Times, han instado a Biden a retirarse de la carrera, lo que ha suscitado debates para conceder más entrevistas individuales.
A pesar de haber celebrado más ruedas de prensa en solitario que Donald Trump o George W. Bush en sus tres primeros años, según datos del American Presidency Project, Biden ha celebrado menos que sus otros predecesores, incluidos Bill Clinton y Barack Obama. Los estrategas demócratas creen que un aumento de las apariciones públicas podría ayudar a aliviar las dudas de los votantes.
Además de la política nacional, Biden estará en el punto de mira mundial durante la cumbre de la OTAN del 9 al 11 de julio, en la que debatirá cuestiones críticas con los 32 países miembros de la alianza.
Los demócratas expresaron el domingo su compromiso con Biden como su candidato, descartando la idea de un sustituto e instando al partido a concentrarse en las implicaciones de un potencial segundo mandato de Trump.
Reuters contribuyó a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.